A su paso el huracán Laura dejó al menos 15 fallecidos y miles sin electricidad

En plena campaña y con las elecciones presidenciales a la vuelta de la esquina, el presidente de Estados Unidos Donald Trump, ha visitado los estados de Luisiana y Texas, tras la Convención Nacional Republicana.

 

Un viaje para evaluar los daños causados por el poderoso huracán Laura a los estados más golpeados. A su paso por Estados Unidos ha dejado al menos 15 fallecidos, además de inundaciones de hasta 4,5 metros de altura.

 

Tan solo en Luisina, más de 220.000 personas se encuentran sin agua y sin luz. Las autoridades han avisado de que la restauración de este servicio puede llevar semanas o incluso meses.

 

«Esta ha sido una tormenta tremendamente poderosa. De hecho, cuando llegó era más fuerte que el huracán Katrina. Diría que Katrina fue una especie de récord, en cuanto a devastación, pero Laura tenía más fuerza. Casi llegaba al 5», ha asegurado Donald Trump en una rueda de prensa tras su visita.

 

Según las compañías de seguros, los daños en Luisiana están valorados entre 8.000 y 12.000 millones de dólares.

 

En Texas, el huracán provocó menos estragos entre los ciudadanos pero ocasionó el cierre de plataformas petroleras y una reducción del 84% de la extracción de petróleo en el Golfo de México, lo que supone casi el mismo impacto que sufrió la producción durante el huracán Katrina hace 15 años, cuando hubo una reducción del 90%.

 

Laura que continúa su recorrido se encuentra ya debilitada y ha dejado lluvias torrenciales y tornados en el sur de Estados Unidos. Mientras que Carolina del Norte y Virginia este sábado podrían sufrir el mayor impacto, según el servicio meteorológico.

 

Cuando la tormenta vuelva al Océano Pacífico, se prevé que se convierta de nuevo en tormenta tropical y podría amenazar Newfoundland, en Canadá.