Gregorio Evaristo Leiva violó a su hija, quedó embarazada y recibió prisión domiciliaria por ser de riesgo de COVID-19. Ahora, está obsesionado con una vecina.
Un hombre de 71 años violó a su hija, quien quedó embarazada y el recibió una pena de cárcel. Sin embargo, al ser un grupo de riesgo de COVID-19, le dieron prisión domiciliaria. Ahora, el hombre fue denunciado por acosar a una vecina menor de edad en la localidad tucumana de Alderetes.
El caso se viralizó a través de un hilo de Twitter en que una trabajadora de prensa de Tucumán contó sobre el caso y las trabas de la Justicia local.
Para proteger su identidad le cambió el nombre a la chica, a quien Gregorio Evaristo Leiva acosa continuamente. La madre trabaja hasta tarde por eso decidió llevarla a la casa de una tía. “Yo vuelvo tarde de trabajar y ellas están en manos de este tipo. Ya radiqué varias denuncias. Fui a Fiscalía, por la pandemia está cerrado. Estoy pidiendo que alguien haga algo porque vivo con el miedo de llegar a casa y encontrar a mi hija violada o muerta“, contó.
En junio, cuando regresó a su casa, comenzó acosar verbalmente a la menor. “El miedo de la mamá es que Leiva puede cometer el delito que quiera, porque ya está condenado. Si lo vuelven a condenar, va a seguir con domiciliaria porque nunca va a dejar de ser grupo de riesgo por Covid, por su edad”, explicó el tuit.
Angustiada, la mamá de la víctima dijo que “espera que la Justicia escuche, no quiere tener que aparecer con un cartelito que diga ‘Justicia por mi hija’ porque este hombre ya abusó de ella”.
Fuente: Radio Mitre
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