Ley de Matrimonio Igualitario: “El proceso de inclusión es constante y sin marcha atrás”, aseguró Nicolás Pintos

En este 15 de julio se cumplen diez años desde que, según la ley argentina, el matrimonio “tiene los mismos requisitos y efectos, con independencia de que los contrayentes sean del mismo o de diferente sexo”. Un hecho histórico que marcó la vida de millones de personas y que permitió escalar hacia la conquista de nuevos derechos.


Nicolás Pintos, militante del colectivo LGBT+, integrante de la ONG Colectivo 108 y director de Prevención y Asistencia en la Subsecretaría de Prevención del Ministerio de Desarrollo Social de Misiones, recordó lo que significó vivir aquel momento, en el año 2010, cuando  se aprobó la Ley de Matrimonio Igualitario en el Congreso de la Nación.

 

En conmemoración por la fecha, así lució el Congreso de la Nación.

 

“Era parte de un proceso de búsqueda de derechos para la comunidad LGBT+, un proceso que continuó con la Ley de Identidad de Género en 2012 y la sanción del nuevo Código Civil en 2015 con la incorporación de estas leyes superadoras”, manifestó Pintos en una entrevista con Misiones Online.

 

El además dos veces candidato a concejal en Posadas sostuvo que estas normas significaron un “ejemplo revolucionario para la región y el mundo, una punta de lanza” y reflexionó sobre las luchas futuras: “Hoy, en 2020, vemos en retrospectiva y podemos soñar con una ley de cupo laboral trans, subrogación del embarazo e intersexualidad”

 

Nicolás Pintos.

 

Señaló que a raíz de lo sucedido hace diez años, la vida de los más de 40 millones de argentinos cambió para siempre. “¿Y por qué digo a los 40 millones? Porque a partir de ese momento, todos adquirimos el derecho de elegir a quién amar. Se trata de lograr una sociedad más igualitaria para todos y todas”, expresó.

 

“A mí no se me ocurrió nunca pasar por un Registro Civil, pero pienso en los que sí. Para poder conquistar nuevos derechos, todos tenemos que tener el mismo piso de igualdad, estar bajo las mismas condiciones. El proceso de inclusión es un proceso constante sin marcha atrás”, enfatizó.

 

Todo proceso revolucionario tiene su resistencia

 

 

El funcionario misionero llamó a denunciar todo acto de violencia hacia el colectivo LGBT+ y a la sociedad en general. “Son hechos inaceptables, nadie quiere ni merece atravesar por estas situaciones. Debemos luchar por la no violencia en los hogares”, apuntó.

 

Frente a las manifestaciones de odio y rechazo hacia la comunidad, explicó que “todo proceso revolucionario tiene su resistencia” y afirmó que esa resistencia está sostenida por el miedo a perder privilegios. “Parte de un principio de ignorancia porque nadie le teme a lo que ya conoce”, aseguró.

 

A modo de cierre, Pintos destacó el rol de los medios de comunicación para la difusión de temas abocados a la cuestión: “En la medida que sigan contando estas historias, las personas se van a ir dando cuenta de que podemos abrazarnos todos en una misma causa: vivir una vida digna y sin violencia para todos y todas”.


A.B.V.

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