El joven que denunció haber sido violado por dos amigos en la localidad de Garuhapé, recibió amenazas de parte de los acusados, quiénes buscan impedir que declare su contra.
El joven se encuentra muy afectado psicológicamente por el trauma ocasionado y se ve impedido de prestar declaración testimonial, por lo que el Juez de la causa ordenó la realización de las pericias psicológicas a la víctima, para determinar su estado de salud.
El juez de Instrucción 1 de Puerto Rico, Manuel Gómez Balanda, determinó la carátula de la causa por “abuso sexual con acceso carnal” y notificó a los emputados del proceso judicial.
El hecho ocurrió en diciembre del año pasado durante una “reunión de amigos” en la vivienda de uno de los acusados, en la localidad de Garuhapé. Allí los tres jóvenes, que se conocían del barrio, se habían reunido para cenar y compartir unos tragos.
El hecho tomó conocimiento –al menos en el ámbito judicial– durante el mes de marzo de este año, a partir de la denuncia que formuló la madre del joven en sede policial.
Es así que comienzan las actuaciones judiciales, en el marco de los tiempos procesales sujetos por la pandemia del coronavirus que también afecta el Poder Judicial. El cuerpo médico forense realizó los exámenes médicos al joven supuestamente abusado y se constató “lesiones compatibles con abuso sexual de vieja data”, según trascendió.
Asimismo, el Juez de la causa ordenó la citación de testigos y de la víctima, quién concurre al Juzgado, pero se ve impedido de declarar –ampliación de la denuncia- por encontrarse muy afectado psicológicamente por el hecho y por las presiones que sufrió días atrás de los imputados para que no declare.
Paralelamente, la madre del menor formula otra denuncia policial contra los supuestos abusadores por amenazas, contra su hijo. Los imputados abrían habrían amenazado a la víctima con difundir las imágenes del acto sexual filmado por ellos mismos, en diciembre del año pasado.
Por estas horas, circula la versión en Puerto Rico que dichas imágenes ya habría sido difundida a través de grupos de WhatsApp. Fuentes judiciales dejaron trascender no tener conocimiento de este registro fílmico, aunque se informó que se ha iniciado una causa por amenazas.
Los acusados fueron notificados de la causa en calidad de imputados y el Juez Gómez Balanda espera el resultado de las pericias psicológicas del joven para determinar si puede declarar ante Cámara Gesell de Puerto Rico, dado que el momento de la supuesta violación la víctima tenía 17 años; aunque también siendo mayor, podría prestar testimonial en dicho órgano judicial.
JAS
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