Según manifestó el tesorero del Colegio, Rubén Marcelo Angeloni, hay casos en los que las demoras en los cobros ya superaron los seis meses, y ésta se ha vuelto una situación difícil de sostener para muchos profesionales del sector, a lo largo y ancho de la provincia.
Ruben Angeloni tesorero del Colegio de Bioquímicos de Misiones. RADIO LIBERTAD.
El bioquímico cumple un rol fundamental en todos los equipos de salud y su labor ha sido significada de una manera muy importante en el actual contexto de pandemia, siendo el agente indicado para realizar los estudios de detección del Covid-19. Pero éste es solo uno de los ejemplos que permiten dimensionar la importancia del trabajo del profesional a la hora de realizar un estudio médico.
Este agente de salud despliega su actividad dentro de los laboratorios y el financiamiento de su trabajo deviene, en gran parte, de los convenios establecidos con las obras sociales, muchas de las cuales -principalmente las sindicales- hoy perciben un atraso de gran dimensión en cuanto a sus pagos, manifestaron desde el Colegio de Bioquímicos de la provincia de Misiones.
“Hay un atraso en el pago de las obras sociales sindicales que en muchos casos supera los seis meses, y es exorbitante, tomando en cuenta que para tomar una orden, facturarla y realizar todos los trámites necesarios para cobrar tenemos pactado como plazo máximo unos 60 días. Con la llegada de la pandemia la situación se agravó aún más y hoy estamos fuera de contexto”, expresó Rubén Marcelo Angeloni, tesorero del Colegio.
El exceso de demoras en los respectivos pagos lleva a que los profesionales que conforman el Colegio de Bioquímicos manifiesten su reclamo en la esfera pública, para poder así avanzar hacia una factible solución.
“La profesión bioquímica no es una profesión que solamente aporta los conocimientos, la dedicación y el trabajo de cada día, sino que también es una profesión que en parte financia el funcionamiento del sistema de salud. Nosotros disponemos el lugar físico, los descartables, los equipamientos, los reactivos, los alquileres y los sueldos –entre otras obligaciones-, lo que suma una carga hoy casi imposible de soportar”.
El rango de cobertura de las obras sociales varía a lo largo y ancho de la provincia y en algunas zonas supera el 80%, por lo que la situación de algunos profesionales es muy difícil de sobrellevar. En consecuencia, explicó el tesorero, desde la Comisión Directiva del Colegio de Bioquímicos plantean que se les pague un arancel mínimo, que les permita –por lo menos- restituir los insumos que invierten cada día en los diferentes laboratorios.
“Nosotros tenemos una actitud conciliadora con las obras sociales y por ese motivo no decidimos cortar el servicio. Vamos a seguir atendiendo, pero lamentablemente tendremos que cobrar un arancel mínimo que nos permita mantener el laboratorio abierto”, comentó Angeloni.
A ello agregó que el costo de ese adicional será aplicado a la atención de los afiliados cuyas obras sociales sean parte del grupo que posee demoras excesivas. A los mismos se les entregará un comprobante, para que posteriormente –y en el caso de que se dispongan las condiciones- puedan hacer el correspondiente reclamo ante las mencionadas administradoras de coberturas sociales.
F.S.
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