Personal de la Sección Guardaparques San Pedro del Ministerio de Ecología interceptaron a un concejal de aquel municipio, a un oficial de Gendarmería Nacional y a otro hombre, en la Reserva Biósfera Yabotí, en actitud de caza ilegal y violando además, la cuarentena impuesta por la pandemia del coronavirus.
Los cazadores furtivos fueron detenidos, ayer antes de las 6:00 horas, por la Policía y se les secuestraron en su poder varias armas, municiones y animales que habían cazados en peligro de extinción.
Se trata del edil Roberto Javier Torres (45 años), integrante del bloque Renovador, quien estaba junto al sargento de Gendarmería, Ramón R. (51 años) y un amigo de 32 años, realizaban una excursión de cacería en la Reserva no permitida.
Durante el operativo de aprehensión del trío, se secuestraron un vehículo 4×4 en el que se movilizaban, un rifle calibre 38, marca Armeo Rosi, una escopeta calibre 12 doble caño marca Zabaia, una escopeta doble caño calibre 16, una escopeta calibre 20 marca Amadeo Rosi, dos Armadillas presumiblemente calibre 28, cinco cartuchos calibre 38, seis cartuchos calibre 20, dos cartuchos calibre 20 recargados, cuatro cartuchos calibre 16, cinco cartuchos calibre 28, cuatro cartuchos calibre 16 y nueve cartuchos calibre 12.
Los cazadores furtivos quedaron detenidos en la comisaría de Terciado Paraíso, y se le instruyó una causa en forma preventiva por “tenencia y portación de arma de fuego”, quedando a disposición del Juzgado de Instrucción 3 de San Vicente. Además se les inició un expediente porque estaban violando el Decreto de Necesidad y Urgencia que establece en todo el país el aislamiento social, preventivo y obligatorio, por la pandemia del coronavirus y aquí interviene al Justicia Federal.
Además, en poder de los cazadores se halló una presa cobrada de pecarí, dos presas de paca, dos ejemplares de urú y uno de yacu-poi, especies que están en peligro de extinción.
JAS