El delantero se cansó de las críticas desde su ex club y respondió en las redes sociales.
La novela entre Mauro Zárate y Vélez suma un nuevo capítulo porque el delantero que era ídolo y se convirtió en traidor para los hinchas del Fortín no se quedó callado y luego de varias declaraciones en los últimos días de jugadores, dirigentes y cuerpo técnico respondió con una historia de Instagram tan escueta como contundente: «Ya hice lo que tenía que hacer y GRATIS. Toy donde quiero».
Y es que justamente su vínculo con Boca finaliza el próximo 30 de junio y, sin tanto lugar en el equipo desde la llegada de Miguel Ángel Russo y con un contrato muy caro, su renovación sigue siendo una incógnita aunque tanto el club como el jugador pretenden la continuidad así que todo dependerá de llegar a un acuerdo en la parte económica.
En la semana, Carlos Compagnucci, ayudante de campo del flamante entrenador Mauricio Pellegrino intentó bajarle el tono al enfrentamiento que se generó desde la partida de Zárate y entornar la puerta para un hipotético regreso en el futuro: «Los jugadores que tienen jerarquía siempre son bienvenidos. Hay un problema diferente en cuanto a su relación con el club, con la gente… Cuando llegue el momento, veremos».
Sin embargo, en los días subsiguientes, primero el futbolista Lucas Robertone y después el dirigente Mariano Lizardo, se encargaron de dejar bien en claro que Mauro no es bienvenido en Liniers como ya había declarado anteriormente el presidente Sergio Rapisarda.
Lo cierto es que Zárate se sintió dolido por el maltrato recibido y su respuesta tanto en la cancha como en los medios y en las redes sociales solo ayudó a aumentar el odio de los hinchas de Vélez. Pero a él parece que mucho no le preocupa porque está donde quiere estar.
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