La Policía de Misiones detuvo a un integrante de la fuerza –un sargento de 31 años-, acusado de vender y reducir motocicletas robadas, junto a su sobrino. Además, se lo investiga por su posible vinculación con el contrabando de cigarrillos en la frontera y la Jefatura de Policía ordenó su pase a disponibilidad.
El efectivo era seguido por sus camaradas desde hace un mes atrás, hasta que el juez de Instrucción 1 de Posadas, Marcelo Cardozo, ordenó su detención, junto a su sobrino y la realización de una serie de allanamientos en la ciudad.
De acuerdo a fuentes de la investigación, el sobrino del policía se dedicaba al robo de motocicletas, en tanto, el efectivo fraguaba operativos policiales e incautaba los rodados, que luego eran reducidos y sus autopartes puesto a la venta.
Se sospecha además que el uniformado sustraía motos secuestradas que permanecían en los corralones de la Policía, se contactaba con sus dueños y los entregaba a cambio de un monto de dinero, dependiendo de la cilindrada.
También, el efectivo estaba en la mira de los investigadores por su posible vinculación con el sub-mundo del contrabando de cigarrillos en la frontera, que salpicaría a un jefe policial.
El sargento de Policía y su sobrino, fueron detenidos ayer por la mañana y puestos a disposición del Juzgado pertinente. El magistrado ordenó además una serie de allanamientos en la ciudad, tras lo cual se secuestró el vehículo Peugeot 308 del uniformado, como así también un arma de fuego, municiones y 70.000 pesos.
El sargento en cuestión de 31 años, cumplía funciones administrativas en Unidad Regional X, pero antes había se había desempeñado en otras dependencias policiales.
La Jefatura de Policía dispuso de un sumario administrativo interno y su pase a disponibilidad en la fuerza, mientras avanzan las actuaciones judiciales.
JAS
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