Murió Raúl Badaracco, expiloto y dirigente del automovilismo misionero

Una enfermedad terminal produjo su deceso este miércoles por la noche en un sanatorio de Posadas. Corrió en los años 80 y a principios de los 90 se retiró para dedicarse al mundo dirigencial.

El miércoles por la noche falleció Raúl Badaracco, el expiloto del Misionero de Pista que participó de varias categorías del automovilismo local en la década de 1980 y principios de los 90. Era el padre de Tulio y Guillermo, dos corredores que están en plena actividad.

Badaracco fue piloto en la década del 80 y 90 en el Misionero de Pista. Debutó en la última fecha de 1982 con un Fiat 128 en la Clase B del Turismo Nacional Misionero (lo que hoy es la actual Clase 2), que se disputó el 30 de noviembre en lo que fue la inauguración oficial del trazado terrado del Autódromo de Posadas.

En 1981 pasó la Promocional 850cc y hace su primer podio en el automovilismo misionero la tercera fecha disputada el 10 de mayo en el Autódromo de Resistencia, Chaco (fecha válida también por el torneo Interprovincial de ese año). Paralelamente sigue en la Clase B del Turismo Nacional Misionero.

Su mejor año en la Promocional 850cc fue en 1983 cuando terminó tercero en el campeonato.

El 6 de octubre de 1986 gana su primera carrera en el Misionero de Pista y se anota como ganador en la Clase B del Turismo Nacional Misionero en el Autódromo Panorámico de Eldorado y ante su gente. Ese día fue fiesta completa de los Badaracco ya que su hermano Guillermo se consagró campeón de la Promocional 850cc.

Corrió hasta principio de los 90, cuando se retiró y empezó a ser dirigente, primero en su club, el Automoto Club Enrique Seeber de Eldorado, y luego cuando vino a vivir a Posadas, se integró a la Comisión Directiva del Automóvil Club Misiones (ACM) hasta el 2006 cuando resolvió apoyar la carrera deportiva de sus hijos Tulio y Guillermo. Como dirigente también fue parte de la Federación Misionera de Tenis.

Con Tulio entabló una gran relación y siempre estuvo en la radio desde boxes para apoyarlo en el bicampeonato de la Clase 2 del Misionero que logró en el 2007 y 2008 y luego durante su campaña en el Turismo Nacional.

“Su voz gruesa a veces asustaba, pero era una persona muy querida en el ambiente automovilístico misionero. Su legado quedó impreso en el automovilismo misionero, que siempre lo recordará como una gran persona”, escribió el periodista especializado Pablo Lizarraga para el portal Mundo Motor Misiones.

Fuente: Mundo Motor Misiones

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