Coronavirus: «La ciencia y la educación le van a ganar al virus, ahora tenemos que cuidar la salud mental», asevera Facundo Manes  

El neurocientífico se refirió a la inquietud que genera estar en cuarentena y dijo que es «para sobrevivir, para tomar decisiones coherentes», y que el aislamiento es «una lucha colectiva».

El reconocido especialista argentino dialogó con La Nación, en el programa de José Del Río, sobre la ansiedad y los miedos de la sociedad en cuarentena. «Si uno ve la historia de las epidemias, luego cambiaron los sistemas de creencias de la sociedad de ese momento, así que vamos a tener un cambio seguro. Puede ser bueno y eso es lo que espero. Pero también puede ser malo y sacar lo peor de la especie humana: el individualismo, el totalitarismo, la restricción de libertades. Y tenemos que apostar al empoderamiento de la gente, al conocimiento, a valorar la educación, la salud, el bien común», señaló el científico.

 

Y agregó: «Esto va a terminar, como terminó otras veces, con el ser humano ganándole al virus. Quizás con un costo alto que tenemos que disminuirlo lo más posible. Pero la ciencia, la salud y la educación le van a ganar al virus».

Sobre la inquietud que genera estar en cuarentena dijo que, es para sobrevivir, para tomar decisiones coherentes, porque el aislamiento es «una lucha colectiva», hay que preservar la salud mental.

 

Manes señaló que, si bien la sociedad vivió otras epidemias y fenómenos globales como la Segunda Guerra Mundial, esta es la primera vez, dada la tecnología y las redes sociales, en la cual todo el mundo tiene pánico, ansiedad y miedo colectivo. «Nunca tuvimos en la historia de la humanidad una pandemia de ansiedad y de miedo como ahora. Esta es una experiencia única para la especie humana. Nunca hubo tanto miedo a nivel global ni tanta ansiedad simultáneamente y una cuarentena de estas características», resaltó.

 

«Lo que tiene este virus de maligno es que usa lo mejor de la especie humana en nuestra contra, porque nosotros somos seres sociales, necesitamos estar conectados con otros seres humanos. Y ahora estamos diciendo que lo mejor que podemos hacer es la restricción social. Esto puede sacar lo peor de nuestra especie: la mezquindad, el individualismo, la falta de planificación. Pero el camino es que saque lo mejor y tenemos que apostar para ello: la cooperación, la inteligencia colectiva, la estrategia, la inversión y la prioridad en salud y en ciencia», dijo.

 

Para el médico, esto no se soluciona solamente con voluntad ni con garra, sino con estrategia, con gente entrenada y experta en salud pública: «Espero que la política entienda que cambió el mundo, viene un tsunami y nosotros tenemos que reaccionar en forma diferente. No podemos solucionar este problema sanitario, económico, de moral que estamos viviendo, con las mismas prácticas de siempre».

 

Con respecto a las medidas que tomó el Gobierno a raíz de los casos positivos de coronavirus en el país, el neurocientífico alentó la prevención: «Tenemos que seguir las indicaciones del Ministerio de Salud, no puede haber librepensadores. Esto también depende del comportamiento de la sociedad. Es una mezcla de sistema sanitario, el Gobierno y la sociedad».

 

«Debemos actuar y ser estrictos ya. La mejor vacuna contra el virus hoy es la restricción social, debemos cumplirla. Cuidarnos a nosotros es cuidar a todos. Debemos aprender del diario del lunes, de lo que vimos en China y Europa. Si logramos que la cuarentena sea efectiva, seria, donde no haya viveza criolla, podemos aplanar el pico de infecciones, permitir que el sistema de salud pueda afrontar este tsunami y los daños van a ser mucho menores. Las decisiones que tomemos ahora van a impactar en los próximos meses. Estamos hablando de reducir el daño y actuar ahora», sostuvo.

 

Para finalizar, dijo qué sucederá con la grieta según él, luego de la pandemia: «Es una oportunidad única que tenemos los argentinos de sentirnos como Nación. Un país es mucho más que un cacho de tierra y un montón de gente viviendo adentro. Una Nación es un sentido colectivo. Y nos agarra débiles porque, cuando tuvimos épocas de veranitos económicos, no invertimos en fondos anticícliclos, permitimos corrupción que hoy sería equivalente a más respiradores o camas de terapia. Espero que aprendamos de esta crisis, tenemos que unirnos por los temas serios, que es invertir en el cerebro de los ciudadanos, en la salud, en educación y ciencia».

 

 

Fuente: La Nación LN+

 

 

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