El autor del brutal femicidio apareció muerto horas después en Baradero, Buenos Aires.
El novio y principal sospechoso del femicidio de María Ester Bartonek (45), la mujer que el martes fue asesinada a golpes en la ciudad bonaerense de Baradero, apareció ayer muerto con un disparo de escopeta en el corazón en el campo donde vivía. Se trata de Fabio Rubén Buey, pareja de la víctima y quien era buscado como presunto autor del femicidio.
El hallazgo se produjo en un campo donde el sospechoso trabajaba como casero y residía, en la vecina localidad de Villa Alsina, donde la Policía había realizado un allanamiento y un rastrillaje, en el que no se encontró al imputado pero sí se secuestró su auto, un Peugeot 206. Buey apareció muerto con una perdigonada a la altura del corazón y con una escopeta junto a él, en la parte trasera de una cabaña de madera ubicada a unos 15 metros de la vivienda del casero. «Ese lugar había sido revisado y rastrillado y no había nada. Tampoco se habían encontrado armas de fuego, por lo que creemos que la escopeta se la llevó al escapar hasta que volvió de noche y tomó la decisión de suicidarse», dijo a Télam una fuente judicial.
Otras fuentes indicaron que los perros marcaron en ese campo el rastro de Buey hasta la vera del río, por lo que se sospecha que pudo haber cruzado a alguna de las islas y que a la madrugada volvió para suicidarse.
El caso es investigado por el fiscal Hernán Granda, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de Baradero, quien indicó que «ahora hay que esperar el trabajo de los peritos, pero la principal hipótesis es que este hombre se suicidó por lo que hizo ayer».
El hecho por el que Buey era buscado fue descubierto a las 4:30 del martes en la calle Mitre al 2600 de la mencionada ciudad del norte de la provincia de Buenos Aires, cuando un vecino llamó al 911 para reportar que había encontrado a una mujer malherida en la puerta de su casa. Se trataba de Bartonek, quien estaba desvanecida y presentaba lesiones por golpes, por lo que fue trasladada de urgencia al hospital local, donde finalmente murió a raíz de las heridas internas cuando era operada.
El hombre que llamó al 911 era el hermano del imputado, quien le contó a la policía que Buey había llegado hasta su casa con su novia malherida y la bajó de su auto, que tuvieron una discusión y que luego el sospechoso escapó a toda velocidad.
Fuente: La Mañana de Neuquén
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