Tras la finalización del período de dos meses de suspensión de cosecha, volvió la actividad a los yerbales misioneros. En Andresito, la Cooperativa Unión decidió reconocer a sus productores el crecimiento de los costos que generó la inflación y comenzó la safriña de verano pagando 18 pesos por kilo de hoja verde, 2,75 pesos por encima del valor oficial. La escasez de materia prima provocada por factores climáticos y por la presencia de plagas, empuja los precios de la hoja verde en toda la provincia.
La actividad yerbatera atraviesa un buen momento gracias al lento pero sostenido crecimiento de la demanda en el mercado interno y de las exportaciones, pero la bonanza no siempre permea hacia los primeros eslabones de la cadena productiva, integrada por productores que necesitan cobrar precios razonables para afrontar los fuertes aumentos que se registraron en sus costos y compensar las pérdidas de producción sufridas por ataque de plagas e incidencias climáticas. De esos precios también depende la remuneración del tarefero, el eslabón más débil de la cadena, cuya situación empeoró en los últimos dos años de la mano de una crisis económica nacional que castiga con mayor severidad a los sectores de menores ingresos.
Atendiendo esas necesidades y a la escasez de materia prima que dejó una cosecha menguada por la caída de la hoja y por el ataque de plagas como el “mal de la tela”, la mayoría de los industriales terminaron la zafra de invierno pagando precios superiores a los oficiales determinados por acuerdo del Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), pero volvieron a bajarlos al inicio de la zafriña de verano, aprovechando que muchos productores llegaron a fin de año con la necesidad de vender para cubrir los crecientes costos, no solo de la producción sino también los relativos al sostenimiento de sus familias.
En ese contexto, se destaca el caso de la Cooperativa Unión, de Andresito, que comenzó la zafriña pagando 18 pesos de contado por kilo de hoja verde entregada en secadero, 2,75 pesos por encima de los valores oficiales vigentes. “Entendemos que 18 pesos no es un precio descabellado. En los últimos meses el combustible aumentó cada 15 días. Para la zafra 2020 la yerba tiene que arrancar por encima de los 23 a 24 pesos. Apostamos todo al productor, resignamos margen del secadero para que el productor se lleve el mejor precio y en los últimos 5 o 6 años esta cooperativa viene punteando los precios en la provincia”, indicó Marcos Petterson, presidente de la cooperativa.
La escasez de materia prima es otro de los factores que viene empujando los precios. “La yerba es un producto que año tras año aumenta su consumo, tanto nacional como internacional. Varios factores hicieron que la zafra 2019 no sea la adecuada. Las inclemencias climáticas provocaron caída de hojas y la continua inflación hace que el productor no disponga de los insumos para limpieza, cuidados y fertilización dando como resultado bajos rendimientos por hectárea mientras crece el consumo. Por ende la falta de producto hace subir el precio de la hoja y a partir de ahora va hacer una constante”, afirmó. “La industria tiene poco stock, es el momento para cobrar lo que vale el producto”, finalizó.
JRC EP