Dos anillos, una musculosa y un chaleco, las únicas pistas tras el hallazgo de la mujer asesinada en Buenos Aires

Los investigadores siguen sin poder identificar el cuerpo de la mujer asesinada que apareció este miércoles en un terreno baldío de Gonzalez Catán.  Hasta el momento, nadie fue capaz de reconocer los restos de la joven, que tendría una edad cercana a los 30 años. Además, el cadáver no presenta características distintivas que puedan resultar de utilidad para determinar su identidad. Por ahora, las únicas pistas con las que cuentan son sus huellas dactilares, dos anillos y algunas prendas.

«Su identidad aún es un misterio. Estamos esperando que a partir de las fichas dactiloscópicas que se le tomaron se la pueda identificar en alguna base de datos», declararon a Télam fuentes judiciales.

En tanto, las pesquisas indicaron que la víctima no presentaba ningún tatuaje, por lo que los únicos elementos distintivos que los médicos forenses obtuvieron del cuerpo fueron dos anillos plateados que la víctima llevaba en el dedo anular.

Con respecto a las prendas que lograron secuestrar, confirmaron una musculosa negra, un chaleco gris inflable y un par de medias tipo soquete color negras con vivos blancos. Es que, tal como indicaron los primeros partes policiales tras el hallazgo, la mujer se encontraba desnuda de la cintura hacia abajo.

Por su parte, la autopsia realizada este miércoles estableció la causa de muerte como un traumatismo de cráneo con fractura de base y macizo facial. Además, se detectó una segunda fractura en el tabique nasal.

Sobre las características del cuerpo, los peritos informaron que la mujer aparenta tener un poco más de 30 años, mide aproximadamente 1,60 metros, tiene tez blanca, cabello largo oscuro y no presentaba signos de sujeción ni lesiones compatibles con abuso sexual con acceso carnal.

También dijeron que se le extrajo sangre para un examen toxicológico que determinará la presencia de alcohol y/o drogas, y que se descartó que estuviese embarazada, como especularon los vecinos que la encontraron.

El macabro hallazgo se produjo alrededor de las 7 de de la mañana del miércoles en el cruce de las calles Llerena y Leonardo Da Vinci, donde personal de la comisaría 1ra. de la Jefatura Distrital Sur de La Matanza se presentó tras un llamado de emergencia al 911 realizado por vecinos.

Al respecto, una vecina llamada Carl aseguró que alrededor de la medianoche había oído»unos gritos terroríficos», pero dijo que su padre no la dejó salir de su casa porque justo en ese momento se había cortado la luz.

«Era una chica que pedía ayuda hasta que un momento no gritó más», describió la joven, que se lamentó de no poder haberla socorrido.

(TN)