Para Marcelo Capello es muy probable que la economía se recupere pero advirtió que para consolidar el crecimiento habrá que evitar errores del pasado

El investigador jefe del instituto Ieral-Mediterránea, Marcelo Capello, fue el expositor principal de un almuerzo de trabajo que organizó la regional NEA de la mencionada fundación para celebrar su 32° aniversario y que contó con el gobernador electo Oscar Herrera Ahuad como invitado especial. El economista fue optimista respecto a la posibilidad de que la economía rebote el año próximo motorizada por el consumo interno.  Advirtió empero que sostener el crecimiento en el largo plazo dependerá de mantener la competitividad cambiaria, lograr un equilibrio entre mercado interno y exportaciones y captar inversiones. Consideró que el cepo seguirá algún tiempo más y que las tasas de interés podrían seguir bajando.

 

La regional NEA de la Fundación Mediterránea cumplió 32 años y los celebró con un almuerzo de trabajo en un restaurante céntrico de Posadas al que asistieron unos 50 empresarios, la mayoría de los cuales están en la nómina de socios de la regional presidida por el constructor Pablo Ratti, además del gobernador electo Oscar Herrera Ahuad; el intendente electo de Posadas, Leonardo “Lalo” Stelatto y el ministro de Desarrollo Social, Lisandro Benmaor.

 

El encargado de abrir las exposiciones fue el investigador jefe de la regional NEA del instituto IERAL, Gerardo Alonso Schwarz, quien exhibió datos que demostraban que la composición de la oferta exportadora misionera prácticamente no cambió en los últimos 20 años y destacó la necesidad de incorporar exportaciones más complejas a esa oferta para sostener el crecimiento  en la economía provincial.

 

El orador principal fue el investigador jefe del IERAL a escala nacional, Marcelo Capello. Durante su exposición y en un diálogo posterior con Misiones Online, el economista consideró que luego de dos años seguidos de recesión, ajuste fiscal y varias devaluaciones, hay condiciones para que se produzca un rebote en la etapa inicial de la gestión de Alberto Fernández, pero advirtió que consolidar el crecimiento en el tiempo será bastante más difícil.

 

Señaló que el cepo cambiario en su versión más dura aportó estabilidad en el tipo de cambio y logró contener la caída de reservas del Central -que al contrario de lo ocurrido antes de las elecciones, se están recuperando –  y eso posibilitaría ir reduciendo progresivamente la inflación, que bajen las tasas de interés y que se recuperen el crédito y el consumo.

 

La estabilidad cambiaria  posibilitaría que los salarios vuelvan a ganarle a la inflación y con ello repunte el consumo.

 

Por su eficacia para contener al dólar, Capello consideró probable que el cepo siga vigente. “Si subiera el dólar es difícil pensar que se recupere el consumo, por eso el cepo va a seguir. Si bien en el largo plazo es negativo, (el cepo) en el corto plazo puede generar tranquilidad en el mercado de cambios necesaria para una reactivación. Lo que puede llegar a subir es el blue, sobre todo si hay mucha emisión de dinero. El (dólar) oficial es difícil que suba con el cepo duro que tenemos. El problema hoy es que hay mucha oferta para poca demanda, porque está liquidando mucho el campo”, afirmó.

 

Argumentó que con un dólar más tranquilo, al que se suma algún leve aumento en la emisión de dinero producto de las compras de dólares que está haciendo el Central, se empieza a generar un clima más propicio para una reactivación, “y si hay alguna recuperación de los ingresos de salarios y jubilaciones, al menos para un sector de población, eso va a ayudar a que haya algún rebote, ya hubo dos años de caída es lógico que haya algún rebote”, razonó.

 

Consideró “muy probable” que ese rebote ocurra y que se dé durante el primer año de gobierno de Fernández, aunque advirtió que “si después eso se convierte en crecimiento económico, es decir si dura en el tiempo, va a depender de otros factores: que no se cometan las equivocaciones que hubo 2007, 2008 y en adelante, pero para eso todavía hay tiempo para ver cómo se actúa”, indicó.

 

Señaló que para consolidar el crecimiento será fundamental no retrasar el tipo de cambio, lograr un balance apropiado entre mercado interno y exportaciones, no generar un modelo con sesgo antiexportador y captar inversiones.

 

Advirtió que si el cepo perdura demasiado tiempo en su versión más dura, el atraso cambiario será un riesgo cierto. “No debe ocurrir lo mismo que pasó de 2011 a 2015, con el otro cepo el dólar oficial se había abaratado mucho, ahora es probable que ocurra algo parecido”, dijo.

 

Remarcó además que la política que anticipó el presidente electo de poner “plata en el bolsillo a la gente” puede generar inflación. “Si queremos recuperar de repente todo el poder adquisitivo que perdieron los salarios en los últimos años va a haber más inflación. Seguramente va a haber recuperación pero después se tiene otro tipo de problemas. Pero si es algo moderado y se lo va manejando con cuidado sin echar a perder el modelo más competitivo que hay ahora para las exportaciones con un dólar relativamente alto, se puede encontrar un equilibrio entre mercado interno y exportaciones que es lo que Argentina necesita imperiosamente”, opinó.

 

“Argentina tiene períodos de mercado interno muy bajo con exportaciones rentables de las que pasamos a situaciones con mercado interno muy arriba pero en las que no es rentable exportar y empiezan a faltar dólares. Tenemos que encontrar el equilibrio”, señaló.

 

Otro aspecto positivo que destacó Capello es la posibilidad cierta de que las tasas de interés continúen bajando, lo que beneficiaría al crédito. “Como ya no tenemos esta restricción de emisión cero que habíamos acordado con el Fondo (Monetario Internacional) el año pasado, esa mayor emisión ha ido rescatando Lelics y fue bajando en alguna medida la tasa de interés y eso puede seguir.  La combinación de cepo, alguna emisión de dinero y rescate de Lelics puede hacer que baje más la tasa de interés, lo cual es bueno para recuperar el consumo y la actividad”, afirmó.

 

JRC EP