El sujeto estaba detenido por violencia de género y a punto de salir bajo libertad condicional del penal de Bouwer.
La polémica tuvo lugar en la cárcel de Bouwer, provincia de Córdoba. Un hombre condenado por violencia de género se autopercibió mujer, pidió el traslado a una unidad femenina y dejó embarazada a otra reclusa, a días de salir en libertad condicional.
La situación fue comentada por el abogado defensor del hombre acusado: «Hace un par de meses, un defendido mío se autopercibió mujer y realizó el trámite ante el Registro Cívico y la ley lo asistió: pasó a llamarse Gabriela Nahir», sostuvo en diálogo con Canal 12 de la mencionada provincia. Para el letrado es cuestionable la facilidad con la que se otorga el cambio de género en estos casos. «No hay exámenes psicológicos ni nada y la persona puede ir y volver cuantas veces quiera. Es peligroso», afirmó.
A partir del cambio de identidad para “Gabriela”, la Justicia ordenó su traslado a una cárcel de mujeres. Una vez en el penal, tuvo más de un inconveniente. Según denunció su propio defensor oficial, no sólo mantuvo relaciones sexuales con una compañera y la dejó embarazada, sino que también, familiares de otras internas pusieron las quejas de que «se paseaba como Dios lo trajo al mundo».
«El chico cuando sale se puede autopercibir hombre. Puede ir y volver cuantas veces quiera. Ahí hablamos de la liviandad de la ley», resaltó Gacitúa, alertando sobre el vacío legal que existe en estos casos.
Así mismo, “Gabriela” fue liberada bajo libertad condicional ya que el juez consideró que cumplía con las condiciones para ello, mientras que la mujer embarazada deberá completar una larga condena, aunque por su estado se salud podría hacerlo bajo la condición de prisión domiciliaria.
Fuente: Los Andes