#OrgulloMisionero: arquitectos misioneros quedaron finalistas en concurso para construir una escuela en Haití

Cuatro jóvenes arquitectos resultaron entre los 20 finalistas de un concurso que convocó a más de 400 participantes de todo el mundo, logrando así el objetivo de seguir posicionando a la profesión en la provincia y a nivel internacional.

El proyecto arquitectónico de Lucas Fulquet y junto a los arquitectos Matías Falero, Elias Barczuk y Alan Kruk, quedaron entre los 20 finalistas de entre más de 400 proyectos presentados por expertos de todo el mundo.

Este reconocimiento forma parte de la iniciativa que un grupo de egresados y estudiantes de esta carrera busca: posicionar la profesión de arquitectura y demostrar que en la provincia hay buenos profesionales.

El concurso Internacional Rural School Haití, lanzada por la plataforma  https://www.arch-sharing.com, en colaboración con la asociación humanitaria TECHO Haití, desafiaba a los arquitectos y estudiantes a construir  una escuela rural para la comunidad de TE NWA, al norte de Puerto Príncipe.

Este fue todo un desafío para los jóvenes misioneros quiénes no solo debieron aplicar los conocimientos técnicos sino que analizaron los contextos sociales, estilos de vida y costumbres de la población.

El proyecto debía responder a numerosos desafíos sociales, constructivos y económicos, proponiendo al mismo tiempo soluciones que mejoren las condiciones educativas. La escuela incluirá 7 niveles de clases y beneficiará a más de 50 niños de la comunidad.

Kruk, precisó que para poder plantear el proyecto estudiaron muy bien las costumbres a pesar de que hasta el clima y el suelo haitiano difiere del misionero. “El diseño pasivo de la escuela busca aprovechar  las ventajas del clima, adoptando estrategias como las orientaciones sur-norte, separación del suelo, dobles envolventes para generar fachadas ventiladas, iluminación natural y captación total del agua de lluvia para riego y usos comunes”, señaló en su proyecto.

Aunque los arquitectos no obtuvieron el primer lugar que los haría acreedores a la ejecución del proyecto, destacaron el aprendizaje que les llevó todo el proceso.

Según Fulquet, este es solo el inicio de otros concursos de los que serán parte.”queremos que más arquitectos se sumen a esta iniciativa”.

Como se recuerda, en una anterior ocasión fueron finalistas de un concurso que mezclaba la música y el arte arquitectónico.

 

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