Escalada de violencia y tres muertos en Chile: terminó el toque de queda

 

Tras varios días de protestas, Santiago vivió una espiral de violencia que terminó con una noche caótica de incendios, saqueos y enfrentamientos y la posterior declaración del toque de queda por parte del Jefe de la Defensa Nacional, Javier Iturriaga, en la noche de ayer. El motivo: un aumento en el precio del subte, que aunque fue suspendido por el presidente Sebastián Piñera no pudo mermar el caos.

El toque de queda fue decretado ayer a las 22 en Santiago de Chile, Chacabuco y las comunas de San Bernardo y Puente Alto hasta las 10 de la mañana de hoy. Luego, se hizo extensivo a Valparaíso y a Concepción. Sin embargo, muchos ciudadanos no acataron la medida y, al menos tres personas, murieron en un incendio en un supermercado Líder, controlado por la cadena minorista estadounidense Walmart.

«Tenemos que informar que hay tres personas fallecidas en un incendio en un supermercado. Dos estaban calcinadas y la tercera fue trasladada a un hospital en malas condiciones pero posteriormente murió», afirmó Rubilar a la prensa.

El hecho ocurrió en la comuna de San Bernardo, al sur de Santiago, donde se produjo un incendio luego de que centenares de personas forzaron los ingresos para saquear el lugar y huyeron despavoridas por las llamas.

Desmanes a pesar del toque de queda

«Habiendo analizado la situación y los desmanes que han ocurrido el día de hoy [por ayer], he tomado la decisión de decretar la suspensión de libertades y de movimiento a través de un toque de queda total». La noche del sábado, el general Javier Iturriaga decretó un toque de queda para enfrentar el clima de violencia que se vive en la capital.

El presidente chileno, Sebastián Piñera, congeló la suba del ferrocarril subterráneo como una forma de apaciguar el estallido social, pero ni esa medida ni la presencia de los militares en la noche evitaron una nueva jornada de violencia.

Pese a la medida, miles de personas salieron de sus casas a manifestarse a través de cacerolazos y se mantuvieron reunidas pese a la restricción horaria. Walmart informó que 60 de sus locales sufrieron ataques y en Ñuñoa, una de las comunas símbolo de la clase media emergente, se quemaron 35 vehículos que estaban aparcados en una automotora.

Los uniformados también llegaron a Plaza Italia, a pasos de la embajada de la Argentina, para contener eventuales desórdenes. En este punto neurálgico de la capital chilena, se reunieron muchísimas personas para participar de los cacerolazos y la tensión fue en aumento. El Gobierno ya había invocado la Ley de seguridad del Estado, pero la cercanía del toque de queda introdujo más tensión.

Los incidentes también se sucedieron en otras ciudades. En Valparaíso se incendió y saqueó el histórico edificio del diario El Mercurio; una estación ferroviaria se quemó por completo y numerosas barricadas bloquearon el tráfico, lo que llevó a la autoridad regional a decretar toque de queda desde la medianoche, a cargo de infantes de marina que sitiaron el puerto chileno. Varios videos de redes sociales dieron cuenta de la dureza con la que actuaron los efectivos desplegados en Valparaíso.

En Concepción se decretó estado de emergencia después de numerosos saqueos y, más tarde, también el toque de queda se hizo extensivo allí. En Coquimbo un supermercado de la empresa Walmart se consumió por completo por las llamas. Los ataques también incluyeron a la Cruz del Tercer Milenio, la más icónica construcción religiosa de la ciudad, y que está enclavada en cerro El Vigía.

Numerosas celebraciones como bodas y cumpleaños fueron suspendidas o debieron finalizar de forma anticipada. Cerca de la 1 de la madrugada las calles quedaron vacías. Con un tono menos conciliador que el propio presidente Piñera, el ministro del Interior Andrés Chadwick entregó una declaración en la madrugada realzando la lucha del gobierno. «Las fuerzas del Ejército están concentradas en lo que hemos definido como lugares estratégicos, fundamentales para el funcionamiento de la ciudad», dijo.

«Estamos enfrentando una situación de una acción vandálica, sino en distintas ciudades del país. Un vandalismo que no lo habíamos visto actuar de la manera que lo ha hecho. Pero se tomarán todas las medidas para garantizar el orden público», agregó el funcionario. Por su parte, el ministro de Defensa, Alberto Espina, informó que este domingo habrá más de nueve mil militares en las calles.

(LaNación)

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas