Ocho personas lo encerraron cuando iba en su camioneta pero sólo uno está detenido por ser autor del disparo.
Un hombre de Villa Ballester, en el partido de San Martín en Buenos Aires, fue perseguido y asesinado tras confundirlo con un delincuente que se dedicaba a robar casas en el barrio. En un confuso episodio, uno de los hombres disparó contra la camioneta y mató al conductor que resultó ser vecino del asesino.
La víctima fue identificada como Jonatan Ezequiel Sagardoy, de 32 años, que trabajaba hace diez años en la sección carpintería de “Easy” de San Martin y no tenía antecedentes penales. Sagardoy fue a visitar a un amigo y en el trayecto comenzaron a perseguirlo cuatro vehículos, una camioneta Renault Master blanca, una Peugeot Partner, un Fiat Palio y una motocicleta.
Ante las amenazas de los vehículos, Sagardoy detuvo la marcha de su camioneta y fue rodeado por los otros vehículos de donde se bajaron los ocupantes, entre ellos, Guillermo Nicolás Gómez, de 26 años, quien efectuó dos disparos.
«El que tenía el arma se acercó por el lado del acompañante de la camioneta de Jony, que tenía la ventanilla baja, y sin mediar palabra le pegó un tiro que le ingresó por la axila derecha», relató Olivieri, cuñado de Sagardoy.
Sagardoy fue trasladado al Hospital Castex de San Martín, donde descubrieron que la bala, de un arma calibre 22, le había causado un gran daño interno y estaba alojado en la ingle. El hombre murió el lunes a la tarde.
La investigación policial descartó que se tratara de un homicidio por robo y los propios testigos afirmaron que todo se trató de una confusión por lo que la policía caratuló al incidente como un crimen por error.
Olivieri afirmó que: «Nos enteramos que entre los que cometieron el hecho había un conocido de Jony. Cuando los familiares y amigos empezamos a contar por redes sociales lo que había sucedido, este muchacho se comunicó con nosotros y nos contó llorando lo que había pasado, que se habían equivocado de persona»
Queremos a todos presos. Todos fueron responsables de este asesinato», expresó Olivieri, para quien «estos asesinos salieron a cazar a cualquiera», y su cuñado fue una víctima aleatoria.
El presunto autor del hecho, Guillermo Nicolás Gómez ya se entregó a las autoridades y quedó detenido mientras las siete personas que también participaron del hecho siguen libres. La causa fue caratulada como «homicidio agravado por el uso de arma de fuego».
Fuente: La Mañana de Neuquén
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