El argentino fue fundamental en el 3-1 del equipo de Guardiola como visitante frente al Bournemouth.
El Manchester City despejó rápido la bronca que le quedó flotando en el aire luego de un 2-2 contra el Tottenham en el que -como ya le había ocurrido en la última Champions ante el mismo rival- el VAR tuvo una actuación determinante que lo privó de un gol que habría sido clave.
El equipo de Guardiola venció 3-1 por la tercera fecha de la Premier League a un Bournemouth que en los números se presentaba como un rival de cuidado: como el City, había sumado en las dos primeras jornadas cuatro puntos, producto de una victoria y un empate. Y el aporte de Sergio Agüero, con dos tantos, fue clave para esta nueva alegría del equipo de Manchester. Además, con sus anotaciones llegó nada menos que a los 400 tantos en su carrera.
El Kun, que venía de protagonizar en el choque ante Tottenham una tórrida discusión con Guardiola dentro de la cancha y a la vista de todos (aunque luego del partido se estrecharon en un abrazo y todo pareció solucionarse) fue justamente quien hizo festejar temprano al City.
Agüero apareció a los 14 minutos con su sello de goleador. Fue en una jugada que arrancó él con un toque lateral y que luego se enredó en el área. Pero el argentino estuvo donde tienen que estar los goleadores y con todo su oficio desarmó el nudo gracias a una definición precisa y a un rincón que significó el primer gol del partido.
Si bien el local consiguió por momentos prevalecer en el partido y tuvo algunas chances de conseguir el empate, la mayor calidad y contundencia del City afloró cerca del final del primer tiempo. A los 42, Sterling apareció como un fantasma en el área y definió con calidad para el segundo gol.
Parecía que iba a tener un tránsito tranquilo a partir de ahí el City, pero se encontró con un imprevisto: el tremendo golazo de Harry Wilson, que a los 48 del segundo tiempo clavó un tiro libre en el ángulo para el descuento del equipo local.
La historia no terminaba entonces de estar finiquitada. Pero la mayor jerarquía individual era un pagaré que el City podía quebrarse en cualquier momento. Y así lo hizo nuevamente a los 19 del segundo tiempo: y otra vez fue el Kun, con el olfato para capturar una pelota perdida en el área y facturar, el encargado de marcar la diferencia en el resultado.
Para el City, donde también fue titular el argentino Nicolás Otamendi, fue importante volver a sumar de a tres para impedir que se escapara en la punta el Liverpool, vigente campeón de Europa y que marcha con puntaje ideal en el torneo: este sábado sumó su tercera victoria al superar por 3-1 como local al Arsenal. Ahora los de Guardiola se ubicaron como escoltas, a apenas dos puntos.
(Clarin)
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