A quienes de nosotras no nos gustaría tener un cutis luminoso que irradie juventud y belleza? Por cierto hablemos primero de hábitos, que sin ellos no llegaríamos a nuestro objetivo deseado.
Tener una piel saludable no requiere solamente de invertir fortunas en cremas, ni pociones mágicas que existen en el mercado, la dieta y los nutrientes que consumimos son fundamentales en su cuidado. El estar tranquila y disfrutar de momentos agradables, y mejor aún al aire libre, influyen muchísimo en tu salud y bienestar general, y eso realmente se refleja en la piel del rostro sin dudas.
Hay una cuestión muy importante en todo lo hablado y es que “La piel proporciona una barrera para proteger al cuerpo de la invasión de bacterias y otros posibles peligros ambientales que pueden ser peligrosos para la salud “
Podemos hablar mucho más respecto a los que representa tener una piel sana y cuidada, y hoy vamos a enfocarnos en conocer algunos factores que la hacen estar en mejores condiciones.
#1: Tomar agua y utilizarla como elemento de limpieza son condiciones más que indispensables para una piel bella y sana. Creo que es la primer y gran aliada de nuestra lista, por todos los beneficios que brinda como por ejemplo ayudar a la capa más superficial de la epidermis a protegernos ante las agresiones del entorno y aumentar su elasticidad y regular la función de nuestros órganos internos.
#2: Protejela del Sol usando protector solar y no solo cuando vas a la playa. La Tablet, los teléfonos celulares, la computadora y cualquiera de los equipos tecnológicos que usamos diariamente irradian lo que se conoce como High Energy Visible (HEV) Light, tan nociva como los rayos UVA y UVB combinados y es responsable del envejecimiento digital o digital aging. (Contaminación electromagnética y luminosa).
#3 La piel es el reflejo de nuestro estado emocional. Si sos una persona que continuamente esta envuelta en episodios de tensión podrías desarrollar acné, rosácea, psoriasis o hasta vitíligo. Además de otros trastornos como aparición de ojeras, arrugas tempranas, calvicie prematura y la lista sigue…
Es muy importante tomar conciencia de lo que el estrés es capaz de hacer en nosotros, y esto no solo por ayudar a nuestra belleza exterior, si no para lograr un equilibrio que nos sane desde adentro y eso se refleja en el exterior.
Lo podemos lograr llevando hábitos de vida saludables que incluyan una alimentación sana, actividad física regular, y la practica diversos tipos de técnicas de relajación que nos ayudara enormemente a poder controlarlo.
#4 Alejate del cigarrillo, si así como lo leíste, no resulta muy difícil distinguir a los fumadores de los no fumadores por la calidad de su piel.
Muchísimas sustancias nocivas que proceden del cigarrillo aportan a sumar una serie de características que muestran el daño que el tabaco provoca en la piel: “arrugas muy marcadas, semblante demacrado, huesos prominentes, piel grisácea o apagada y dientes amarillos”.
Puede parecerte que son muchas cosas las que hay que tener en cuenta para tener un rostro sano y revitalizado, pero en realidad es que hay muchísimos factores más que influyen en la salud de tu piel y los iremos viendo en cada encuentro de “Entre Nosotras” para que los puedas ir incorporando a tu rutina diaria. Y así guiarte a un nuevo concepto de cuidados personales que te impulsen a brillar desde adentro.
Por: Mariana Astegiano, Maquilladora & Cosmetóloga.