Exportadores sostienen que como en toda negociación, el acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur «tendrá sus ganadores y perdedores»

Ruben Almirón, empresario del sector señaló que desde la firma del acuerdo hasta su entrada en vigencia pasará años porque aún se requiere el consenso entre ambos bloques. Recomendó evitar hacer “futurología” al tratar de predecir el éxito o fracaso del convenio e instó a los sectores público y privado a trabajar en pro del desarrollo de la competitividad del mercado argentino.

En la última semana, el histórico Acuerdo de Asociación Estratégica entre el Mercosur y la Unión Europea, el primer gran paso para un posible acuerdo de libre comercio entre ambos bloques, generó un amplio espectro de reacciones en el sector empresarial. Entre los que ven con grandes expectativas y oportunidades para las empresas locales se encuentra Rubén Almirón, miembro de la Cámara de Exportadores de Misiones y experto en logística.

“Es un gran paso que después de 20 años se haya firmado este acuerdo. Ahora falta leer la letra chica para saber cuáles son los detalles que serán atractivos o no, dependiendo de cada sector”. Almirón destacó que el Mercosur (Paraguay, Brasil, Uruguay y Argentina)  haya dado el salto de tener acuerdos con solo Egipto e Israel y que, como resultado del acuerdo, tenga la posibilidad de negociar con 28 nuevos países.

“Aproximadamente 500 millones de personas llegarán a sentirse beneficiadas porque es un acuerdo de libre comercio donde se eliminan los aranceles, pero con nuevos aspectos”.

Un acuerdo con novedades

Entre esos nuevos aspectos a los que el empresario hace referencia, resaltó  los anexos referidos a la protección de patentes, protección de actividades laborales de los empleados y uno de los puntos más difíciles que -en su opinión casi desbaratan la firma de este acuerdo- fue la sección referida al medio ambiente, a la que Brasil hace mucho hincapié por estar alineada con las políticas de protección medioambientales de Estados Unidos.

(Ruben Almirón)

 

Diversas proyecciones

Sobre las proyecciones sobre el impacto en el mercado interno que traerá este acuerdo, como el relacionado con el sector maderero donde el presidente de la Asociación Maderera, Aserraderos y Afines del Alto Paraná (AMAYADAP), Román Queiroz, advirtió que por altos costos fiscales y de fletes la forestoindustria de la región es menos competitiva que la de los demás países del Mercosur, especialmente Brasil y Uruguay, y muchísimo menos que la europea, situación que se agravó el último año por la descomunal suba de las tasas de intereses en Argentina. En esas condiciones advirtió que un proceso de apertura comercial implicaría altos riesgos de perder mercado interno y pocas posibilidades de ganar en exportaciones.

Almirón recordó que el acuerdo es el paso inicial y que no deberían hacerse preámbulos porque aún falta la revisión de las autoridades de cada país.  Señaló que la mayoría de los aranceles se darán de forma inmediata, aunque los sectores considerados sensibles tendrán todo un periodo de aplicación.

“Desde mi óptica es hacer futurología porque falta mucho todavía, estamos dando el primer pasito(…) hay mucho ejercicio por realizar desde el sector privado para buscar más tecnología y acuerdos de complementación”.

Señaló que el acuerdo será una gran herramienta de negociación con una parte del mundo que tiene un nivel pér cápita muy alto y que son exigentes en cuanto a la compra de productos “debemos considerar que siempre habrán ganadores y pueden haber perdedores y en general, este tipos de acuerdo se negocian. Todo se negocia, habrá ventajas para uno y desventajas para otro”.

Falta de competitividad

Aunque recomendó no apelar a la suposiciones, sí coincidió con el empresario maderero en la falta de competitividad que se vive en la Argentina por los altos costos de producción. Para Almirón existen dos aspectos fundamentales que ocasionan que este país no sea competitivo frente a sus pares: los costos de producción elevados y la lejanía aun puerto.

Para el empresario, en el primer caso esto se traduce en elevados costos laborales, una alta carga impositiva y en el segundo aspecto, ante la ubicación poco estratégica, los costos de carga logística se encarecen.

 

Otros países también se preocupan

Para el hombre de negocios, el proceso para que este acuerdo marche requerirá de un largo consenso. Recordó que la postura de Francia respecto a la posible afectación del sector agrícola. El gobierno Francés, que encabeza Emmanuel Macron, anunció que “todavía no está listo” para ratificar el acuerdo comercial alcanzado el pasado sábado entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur.“Vamos a mirarlo en detalle y en función de esos detalles, decidiremos. Por el momento, Francia no está lista para ratificar el tratado”, dijo este martes la vocera Sibeth Ndiaye en una entrevista al canal BFM TV.

Explicó que pedirán “garantías” a los países del Mercosur . Francia teme que su sector agrícola se vea afectado por la llegada masiva de productos sudamericanos al mercado, especialmente por las importaciones de ganado vacuno y azúcar.

 

SPM