En el tren vida nos encontramos con artistas, distintos personajes que transitan por nuestra vida, que se cruzan, los que están solo un instante y siguen, simplemente necesitaron pasar, los que permanecen, lo que viajan un trayecto largo, los que se suben en una estación y se bajan en la próxima, los que no alcanzan a subir, los que se quedan dormidos en la estación y así tendremos innumerables compañeros de ruta.
Con todos finalmente nos encontraremos en una estación y ahí entre distintos destinos, partidas, llegadas , cada uno seguirá o tomara su rumbo, habrá despedidas, reencuentros, corridas para alcanzar el próximo tren y en el medio de toda esa vorágine donde habrán etapas donde nos acompañaran distintas emociones, la melancolía, alegría, la tristeza, la sorpresa, esa amiga que suele estar expectante ahí, pero hay veces que estamos tan convencidos de saber qué es lo que viene en qué momento y como será que perdemos la curiosidad y el asombro, sin embargo, la espera en un vagón y no solo para sorprenderte, sino que está ahí, como herramienta para serte útil con tus compañeros de viaje.
La sorpresa está ahí para vos, para que comuniques eso que esperabas decir, se viste para la ocasión y te espera. Te espera para que la mires, la aceptes y recorras con ella el viaje.
Aceptarla como modo de encarar el viaje, donde nunca se sabe en qué momento puede aparecer la música ¿alguna vez saliste del trabajo y te paso ir caminando por la calle quizás mirando bajo, reflexivo o quizás pensando en lo pendiente, en lo de mañana en la tareas que tenía que realizar y no realice, en la llamada que me falta hacer. En los chicos, en la casa en los compromisos pendiente y te encontraste con música?
Así de repente en una esquina inesperada sin aviso, en una estación un grupo de salsa toca en un rincón, sonando con trompetas con alegría, conectándote con la celebración, o quizás un violín te resuena y te lleva a volar a los más íntimo. ¿Qué te ocasiona sorprenderte ante la vida? lo mismo puede suceder con vos si a las cosas que tenés para decir, para transmitir, le agregas una pizca de sorpresa. Podes crear experiencias inolvidables con otros.
Aprender a asombrarnos y llevar el asombro en nuestras palabras, en nuestro cuerpo como un truco de magia hacer aparecer algo que no estaba y generar una sonrisa, llegar a un acuerdo a una estación deseada.
Quizás no todas las sorpresas de la vida te brinden alegría, algunas inesperadas quizás te causen decepción pero es en este momento dónde vas a encontrarte con los mayores aprendizajes.
La sorpresa no está en un viejo vagón perdido, viaja con vos, mírala, estar presente para no dejar que se escape, el momento es aquí y ahora, conversa y transmití con ella, que el viaje será mucho más amable, mucho más curioso e inesperado.
Transmitir con el asombro, con la sorpresa en el viaje de tu vida, que lo que tengas para decir convierta a tu tren en el más inspirador, en el más ilustrado.
Sorprender como una forma de mostrar lo más profundo que hay en tu corazón de una manera autentica. Sorprende con tu relato.
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Natalia Ferreira.
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