La Franja volvió a perder por la mínima diferencia y no logró el ascenso. Sobre el final del partido, Diego Núñez (el también verdugo en Villa Sarita, en posición adelantada) le dio el triunfo a Central Norte, que volverá a disputar la tercera categoría del fútbol argentino luego de ganar en su tercera final consecutiva.
El cielo parecía estar más cerca que nunca. Las nubes ocultaban las puntas de los cerros que rodean al Estadio Ernesto Padre Alberto Martearana dándole un marco épico, mucho antes inclusive que la pelota empezara a rodar en el campo de juego.
La euforia en los cantos de los cuatros costados de la tribuna connotaba la confianza del local. Después del 0-1 de la ida, “esta es nuestra tarde” era el pensamiento que se unificaba en las mentes de más de 20.000 personas vestidas con su camiseta blanca y negra. Sobre un pequeño costado, alrededor de 100 almas que abandonaron el veranillo de su hogar y recorrieron más de 1000 kilómetros para llegar a la fría Salta desafiaban no sólo a los 8 grado, sino que, principalmente, se revelaban contra la mayoría que los rodeaba desde los cuatro costados, usando la ilusión como arma.
“Se viene una batalla”, vaticinó un relator radial y, como si lo hubiesen escuchado, apenas se pronunciaron esas palabras, el santiagueño Héctor Rivero miró hacia las nubes, que ya se habían acercado un poco más, bajó sus ojos e hizo sonar su pito dando inicio al encuentro.
El partido, le dio la razón al relator: fue una batalla
En el primer tiempo, prevaleció el juego físico, siendo la fricción y la marca fuerte una constante. Hubo poco lugar para el juego asociado. Antes de los 15, el DT Franjeado, Manuel Dutto, tuvo que realizar su modificación: Juan Lazaneo arriesgó, pero se resintió de su desgarro y tuvo que ser reemplazado por Guido Da Silva.
Esteban Klyniauk tuvo la más clara en la primera etapa para la visita. A los 41´, Miguel Gómez habilitó al volante, quien se fue mano a mano con el arquero rival, pero se resbaló sobre el final y el portero se quedó con el balón. Antes, Eduardo Flores tapó lo que podía ser el 1-0 a favor del local.
En la segunda parte, a las pocas ideas para llegar al área rival con toques, a Guaraní se le agregaron dos ingredientes más: el nerviosismo y la desesperación.
La Franja buscó, sin ideas, llegar al empate, dejó espacios y el dueño de casa tuvo oportunidades para liquidar la serie. A los 68´ una pelota cruzada llegó a la cabeza a Diego Núñez (el verdugo de la Franja en Villa Sarita), quien estaba ubicado abajo del arco, empujó el balón con la frente y cuando todo el estadio gritaba gol, un manotazo salvador de Flores ahogó las palabras y le siguió dando vida a los de la Tierra Colorada.
Los minutos posteriores fueron un calco. Los de Villa Sarita yendo con el corazón y Central amagando con cada contragolpe con ponerle el punto final a la ilusión franjeada. Finalmente, Núñez logró vencer sobre el ocaso del encuentro a Flores y dio por terminado los sueños franjeados con un derechazo.
Guaraní perdió 1-0 en Salta, pagó caro el polémico 0-1 de la ida y se quedó sin Federal A. Ahora, el elenco posadeño deberá enfocarse en la Liga Posadeña, si es que quiere volver a disputar el Torneo Regional Amateur el año que viene y tener una nueva revancha,
(LD, enviado especial)
El partido del ascenso: Guarani visita esta tarde a Central Norte para definir el pase al Torneo Federal A
