Una niña que al nacer pesó 245 gramos se convirtió en el bebé más pequeño del mundo, informó el miércoles un hospital de Estados Unidos tras darle de alta cinco meses después de permanecer en cuidados intensivos.
Se llama Saybie, nació en el Sharp Mary Birch Hospital for Women & Newborns, la maternidad más grande de California, ubicada en San Diego. Es la bebé más prematura del mundo, pesó 245 gramos (equivalente a una manzana grande) y midió 23 cm al nacer.
La madre de la niña tenía preeclampsia, una complicación del embarazo potencialmente severa que se caracteriza por una presión arterial elevada. «Superaba los 200. Me dijeron que tenía que dar a luz rápido», recordó. «Les repetía ‘no va a sobrevivir'».
«Fue el día más aterrador de mi vida», dijo la mujer que pidió mantener en anonimato a su familia. «Me sentía mal, pensé que era parte del embarazo», explicó.
Saybie nació por una cesárea de emergencia con 23 semanas y tres días de gestación. «Le dijeron a mi esposo que tendría una hora con ella y que luego moriría. Pero esa hora se convirtió en dos, y esas dos en un día, y luego en una semana», contó la madre en un video divulgado por el hospital.
«Apenas podías verla en su cuna», recordó una de las enfermeras, Emma Wiest. «Era increíble, tenía la mitad del tamaño de un bebé normal de 23 semanas», dijo.
Al ser dada de alta, pesaba 2,26 kg y medía 40 cm, y gozaba de buena salud, según un comunicado del hospital.
«Ella es un milagro, sin duda», dijo Kim Norby, otra de las enfermeras que cuidó de Saybie, quien tenía en su cuna un letrero que decía «diminuta pero poderosa».
Fuente: La Nación.
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