La joven tiene 18 años y pese al inmenso temor a ser agredida posteriormente, hizo la denuncia correspondiente en la Comisaría de la Mujer y a través de las redes sociales. «No porque te vayas a un boliche te tienen que violar, no es justificativo. Nuestra sociedad tiene la cabeza podrida», comentó indignado el padre de la joven.
Juan Portillo en Red Ciudadana
Esta mañana, Juan Portillo, el padre de la joven habló con Radio Ciudadana: “Es cansador, agotador y traumático esto que estamos viviendo, porque no sabés qué puede pasar y tenés que aguantar las opiniones de gente que no te conoce, agravios, insultos de gente que no sabe nada porque no se informa”.
El abuso sexual ocurrió este domingo a la madrugada en la localidad de El Soberbio cuando la joven salió de un boliche con sus amigas. Uno de los jóvenes de apellido Giovanni, que integraba su grupo de amigos y conocidos, la invitó a ir hasta su casa para retirar el auto y poder alcanzarla hasta su residencia.
Considerando la distancia de tres kilómetros que hay desde el casco urbano hasta el lugar donde se encuentra la casa de la joven, esta accedió, ya que, como eran conocidos “no pensó que pasaría algo malo”, indicó el padre.
Y continuó: “Después no supo explicar bien qué pasó porque en un momento casi se desvaneció, se sentía mareada. El le dijo que buscaría el auto del garaje y en eso ella se durmió y cuando despierta el chico estaba arriba. Ella pedía auxilio y nadie la ayudaba. Hasta que pudo salir de ahí y una vez que sale de ese lugar el chico la persigue con una moto y la amenaza pidiendo que no cuente, que él la iba a llevar hasta su casa y que no denuncie. Lo dijo como si no pasara nada, como si fuera un un juego”.
La joven, desesperada, al no ver transeúntes en la calle, accedió a que la llevara. Al llegar a su casa se encerró en la habitación envuelta en llantos. Por lo que los padres se dirigieron hacia ella para indagar sobre lo que ocurría. Al comienzo, por temor, no quiso comentárselo a sus padres, de la misma manera no quiso hacer la denuncia ya que había visto un arma en la casa del joven y temía por ella y por su familia.
Tras la denuncia, el joven fue detenido.
«Espero que los jóvenes tengan mucho cuidado a la hora de ver quienes son realmente sus amigos. Que salgan, que se diviertan pero siempre sanamente y entre personas de confianza. Hoy lastimosamente los jóvenes están muy destruidos por la droga y te pueden poner algo en el vaso en cualquier momento», finalizó el padre de la joven.
AVD
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