Advierten que en el 74% de los siniestros viales se ve involucrada una motocicleta

El ex jefe del Departamento de la Escuela de Tránsito y de Educación vial de la Municipalidad de Posadas, Rubén Tamis, es actualmente encargado de la capacitación de sus compañeros que ejercen el control de tránsito en las calles posadeñas.

Rubén Tamis- Radio Municipal

En comunicación con Radio Municipal, el técnico en seguridad vial se expresó, entre otras cosas, en relación al controversial tema de las motocicletas en la ciudad de Posadas.  Explicó que dichos vehículos se ven envueltos en el 74% de los siniestros viales, pero que la culpa no es de la motocicleta en sí, sino de los conductores: “No hay que demonizar la moto, que como vehículo es muy buen invento, versátil y útil para la ciudad, contamina poco, daña poco el asfalto, se estaciona en lugares reducidos, no ocupa lugar, pero está involucrado lastimosamente en el 74% de los siniestros  viales, pero no es culpa de la moto sino de la persona que va arriba de la moto.”

 

En relación con dichos siniestros, explico algunas de las normas que se deben tener en cuanta al conducir ese tipo de vehículos: como primera medida el sobrepaso debe realizarse siempre por el lado izquierdo, es común observar que los conductores tienen la costumbre de realizar el sobre paso por el lado derecho debido al tamaño y la agilidad al manejar una moto, lo que aumenta considerablemente los riesgos de que ocurran siniestros. También recomienda tener en cuenta los puntos ciegos de los demás vehículos de mayor tamaño, como por ejemplo los colectivos o camiones, que al realizar las diferentes maniobras les es más difícil poder notar la presencia de las motos.

(Rubén Tamis) 

 

En la misma línea, el ex jefe de la Escuela de Tránsito y Educación Vial, agregó que existen elementos de seguridad que son pasivos y que reducen el riesgo de daño después del choque, como por ejemplo el casco: “En la moto el 90% es el casco, seamos optimistas, en Posadas, si no comparamos con el entorno en el NEA, estamos muy bien con respecto al uso de casco, el 87% de los usuarios de motocicleta usan casco en Posadas, en corrientes el 10%.”

 

Por otro lado, se expresó en torno a las muchas aristas que posee la ley de tránsito  y que son desconocidas por la mayoría de los usuarios y que imposibilitan el control más certero de los inspectores de tránsito: “En relación a la cedula de identificación y a la famosa cedula azul, yo explique que es cierto que el registro dice que se vence al año y que si no conduce un conductor que es el titular, debe tener cedula azul, la ley dice: la sola posesión de la cedula acredita la circulación por cualquier conductor y no puede serle impedida, salvo que sea obtenida mediante robo, hurto, engaño o hubo de confianza y otras excepciones que establezca la autoridad de aplicación de la presente”. Y agregó que no existe en nuestro país la forma de efectuar una infracción por vencimiento de cédula o falta de ésta, ya que la cedula azul por ejemplo es únicamente requerida para el traspaso de frontera.

 

En cuanto a la Verificación Técnica Vehicular, explicó que si bien hubo una reducción en la cantidad de accidente desde que es obligatoria también para las motos, el agente más importante sigue siendo el ser humano a cargo: se llama trilogía de las motos que son los 3 factores involucrados en que ocurran los siniestros viales.  “El factor humano, el factor del entorno y el factor vehicular. El factor vehicular es solamente un 15% culpable de que haya tantos siniestros, porque gracias a las verificaciones técnicas se redujo un montón en cuestiones del mal estado de los vehículos. El 5% que le sigue es el factor del entorno, es decir, que no le puedo echar la culpa a la niebla, al barro o a la nieve porque el humano tiene que adaptarse a las condiciones. El 90% es el factor humano, nosotros tenemos que reducir nuestro factor humano de responsabilidad con la educación, no hay otra opción.”

 

Para cerrar el diálogo, Rubén Tamis brindó una reflexión personal explicando que la raíz de los problemas es la falta de educación y e información en general. “El usuario en general desconoce muchos de los factores cruciales a la hora de conducir”, analizó y añadió que “deberían hacerse capacitaciones más exhaustivas y serias, tanto en las escuelas, como a los conductores particulares y a los inspectores”.

 

(A.A)

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