De la cumbre empresarial realizada hoy martes en Eldorado participaron casi todos los intendentes de la zona norte. Se mostraron alarmados por la posibilidad de que el sector privado siga despidiendo trabajadores y reduciendo su actividad. Advirtieron que les resultaría muy difícil condonar tasas porque los propios municipios también atraviesan una situación delicada, las demandas sociales aumentan por la crisis y solo cuentan con la ayuda de la Provincia porque la Nación está en “franca retirada”.
Los intendentes afirman que son los primeros en sentir el impacto de la crisis, porque sus recaudaciones bajan y las demandas sociales aumentan y que además son los primeros en atender los planteamientos de los empresarios. Señalaron sin embargo que es poco lo que pueden hacer desde su órbita y se comprometieron a seguir acompañando a los empresarios en gestiones ante autoridades nacionales y provinciales.
“Vemos que la crisis está golpeando a todos por igual y eso es muy malo para la provincia, no solo para los empresarios, sino para la gente en general. Vemos a todos los industriales afligidos por la continuidad de su empresa. Vemos que están amenazadas las fuentes laborales del sector. Hay un contexto de país que es desfavorable, con un mercado interno que está reducido a niveles prácticamente nulos. Los planes de vivienda han desaparecido y cuando la construcción cae, la actividad maderera se resiente”, destacó el jefe comunal de Wanda, Felipe Jeleñ.
El intendente de Wanda enfatizó que los municipios son los que menos incidencia tienen en los problemas referidos por los empresarios porque las tasas municipales “son insignificantes” frente a las cargas provinciales y especialmente las nacionales. “Por otra parte, la situación económica de los municipios también pende de un hilo y son cada vez más los vecinos que se acercan pidiendo soluciones”, remarcó.
Se refirió especialmente a uno de los puntos señalados por los empresarios: el exponencial incremento que registró el peaje en los últimos tres años. “El peaje es leonino, a veces se hacen recorridos de 30 kilómetros en una ruta que se construyó hace muchísimos años que el mantenimiento se limita a una pintadita y nos terminan aplicando un peaje exorbitante. Termina siendo un costo que no sabemos cómo combatirlo, nos está sacando recursos. Para las empresas de transporte pequeñas cuyos camiones pasan varias veces por día el costo del peaje equivale a varios sueldos”, apuntó.
El intendente de Montecarlo, Jorge Lovato, recordó que desde esa comuna vienen pidiendo desde hace años que se otorgue algún tipo de beneficio a los moradores de zonas cercanas a las casillas de peaje que se ven obligados a pagar sumas exorbitantes por trayectos cortos, pero nunca lograron de las autoridades nacionales el más mínimo interés.
Por su parte, el intendente de Eldorado indicó que ese municipio fue “la primera caja de resonancia por la cantidad de despidos que tuvo Dass” y remarcó la necesidad de hacer todo lo posible para que las empresas de la forestoindustria vayan por el mismo camino.
Remarcó además que con la crisis que afecta a todo el país, el municipio se ve obligado a atender varios frentes. “Tenemos que incrementar la ayuda social, todas las semanas nos encontramos con casos cada vez más difíciles. La provincia está colaborando y mucho, de Nación no tenemos ninguna ayuda directa”, lamentó.
JRC EP
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