Impacto del tarifazo eléctrico en la foresto-industria también generó reacción en Entre Ríos

La cámara maderera de Federación, IMFER, en conjunto con la Unión Industrial de Entre Ríos (UIER), marcaron posición de rechazo a los aumentos de tarifas eléctricas “desmedidas, sumado a que la suba de las tarifas arrastra cargas impositivas nacionales, provinciales y municipales, que redundan en un mayor impacto sobre el costo impositivo que compone el cuadro tarifario. Se trata de otro golpe directo a todo el sector industrial, que ya viene asumiendo importantes incrementos de la energía, entre otros, en medio de un escenario general crítico que vive nuestro país», advirtieron.

 

El gremio empresario elaboró un documento al que accedió ArgentinaForestal.com en el que manifiestan su rechazo al nuevo tarifazo eléctrico del gobierno nacional, golpe que se suma a la crisis económica del país, lo que viene provocando despidos y cierre de aserraderos, como también se viene advirtiendo desde la actividad maderera de Misiones, y desde la propia Federación Argentina de la Industria Maderera y Afines (FAIMA) desde octubre de 2018.

 

El IMFER realizó un relevamiento entre sus socios y demás actores del sector de la cadena foresto-industrial, donde la preocupación primaria es por el nuevo aumento de energía eléctrica. “Este incremento, sumado a la recesión del sector y las inclemencias climáticas, que imposibilitan el ingreso regular de materia prima, atenta severamente contra alguna posibilidad de reactivación del sector y de su propia continuidad”.

La industria forestal en la provincia y en la región de la costa del Río Uruguay, registra según el último censo, 179 aserraderos que emplean de forma directa a unas 3000 personas.

Desde el IMFER explicaron que “el impacto no recae sólo sobre la industria, ya que la industria tracciona a los eslabones que conforman a la cadena foresto industrial, afecta a todos: productores forestales, viveristas, asesores, prestadores de servicios, proveedores de insumos; es decir que, de su nivel de actividad depende el desempeño de los eslabones que la preceden”.

Desde la Unión Industrial de Entre Ríos (UIER) se expresaron sobre la imposibilidad que tendrán las industrias de soportar e incorporar un nuevo aumento de la energía eléctrica, que se aplicará a partir del 1 de febrero de 2019.

Según informó, se estima que el impacto en los establecimientos “alcanzará en promedio entre el 21 y el 27%”.

Al respecto, los empresarios sostienen que “la disposición representará un duro golpe para las industrias, y será letal para las pequeñas y medianas empresas que conforman la mayor parte del espectro industrial en la provincia”.

 

Tras manifestar su “preocupación por los efectos nocivos de la medida”, la UIER advirtió que “la suba de las tarifas arrastra cargas impositivas nacionales, provinciales y municipales, que redundan en un mayor impacto sobre el costo impositivo que compone el cuadro tarifario”. “Se trata de otro golpe directo a todo el sector industrial, que ya viene asumiendo importantes incrementos de la energía, entre otros, en medio de un escenario general crítico que vive nuestro país. Es oportuno subrayar que no todas las empresas estarán en condiciones de soportar esta nueva suba, lo cual profundizará aún más la recesión”, advirtieron en un documento de prensa.

 

Una industria en jaque

En este contexto, el escenario pone en jaque a muchos puestos de trabajo, donde empeora la situación actual en la que se registran suspensiones, recortes en los niveles de empleo y despidos”.

Por ello, desde la entidad empresaria entrerriana se reclamó al Estado Nacional, las provincias y municipios en su conjunto que “tomen las medidas necesarias que les competen”.

 

A la vez, considera “clave mitigar o eliminar los impuestos y tasas distorsivas (componentes no energéticos) que integran la factura de energía, lo que posibilitará morigerar el impacto negativo que tiene esta política en el sector industrial”.

 

 

 

Por Patricia Escobar