Efecto inflación: segundas marcas y dejar de comer en restaurantes son las estrategias de los posadeños para hacer frente a la crisis

Según el INDEC, la inflación de diciembre fue del 2,6% y llegó al 47,6% en 2018. Esto afectó severamente el bolsillo de los consumidores, quienes tuvieron que reestructurar la economía familiar, privándose de gustos y buscando segundas marcas, para que el dinero alcance hasta fin de mes. Vea que dijeron los posadeños sobre cómo incidió la suba de precios en cada hogar.

 

 

La inflación de diciembre fue de 2,6%, por lo que la suba de precios general de todo 2018 terminó siendo de 47,6%. Es la cifra más alta en los últimos 27 años, cuando el país salía de la hiperinflación e incluso superó al 2002, cuando el valor de los bienes saltó por efecto del fin de la convertibilidad.

 

#DatoINDEC
Los precios al consumidor (#IPC) subieron 2,6% en diciembre de 2018 respecto de noviembre y acumularon un aumento de 47,6% durante 2018 https://t.co/HIPPjILHvg pic.twitter.com/W6CNhAG77r

— INDEC Argentina (@INDECArgentina) January 15, 2019

 

Los posadeños no están ajenos a esta situación. MisionesOnline dialogó con algunos de ellos y éstos manifestaron el malestar que les ocasiona esta variable económica. La suba de los salarios no siguió el mismo ritmo que la suba de los precios, por ello, según afirmaron los posadeños entrevistados, tuvieron que optar por segundas marcas de productos de la canasta básica, para así lograr abaratar el total del costo de las compras.

 

Por otra parte, salir de paseo o comer en familia en algún restaurante, también forman parte de esos gustos de los cuales hay que prescindir. “Economía de guerra” fue el término que uno de los entrevistados usó para referirse a la gestión de su economía. Y es que aquellos bienes o productos que no forman parte de la canasta básica ya tampoco tienen lugar dentro del presupuesto familiar.

 

El rubro que más aumentó a lo largo del año fue el transporte, con 66,8%. El Gobierno implementó a lo largo de 2018 dos aumentos escalonados de colectivos y trenes, además del incremento para los boletos de subte. Por su parte, los alimentos tuvieron una suba de precios punta a punta de 51,2%.

 

Los gastos en equipamiento del hogar y en salud, por su parte, avanzaron un 50%. El rubro que incluye a las subas de tarifas (vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles) tuvieron una variación de 45%,7%.

EP/DL