Corrientes: Parajes rurales aislados, emergencia hídrica y sanitaria por las inundaciones en la zona Sur

Los municipios de Esquina, Pueblo Libertador y San Isidro son algunos de los más perjudicadas por las fuertes lluvias. Estela Ojeda, la comunicadora de San Isidro,  dirigente de la CTA y del Foro Nacional de Agricultores Familiares, habló con la radio comunitaria FM La Chicharra: “Se ha declarando emergencia en esta zona, hay familias con agua adentro de sus casas, aisladas, y que han perdido sus cosechas”, graficó.

 

Señaló también que “las vacas, como los ganados menores como chivos, ovejas y animales de granja, están en el agua, sufriendo este desastre climático”.

 

Para Ojeda, los damnificados por las inundaciones, “somos personas afectadas por la falta de inversión en las obras públicas que históricamente les debe el Estado provincial. En este sentido, son ejemplos el corte en la Ruta Nacional 12 a la altura de la localidad de 9 de julio y en la ruta provincial 14, dejando a cinco parajes rurales aislados”.

 

 

En Santa Rosa hay madereras bajo agua

Las inundaciones paralizaron también aserraderos en la localidad de Santa Rosa. En una entrevista radial a FM La Ruta, el empresario maderero Juan Ramón Sotelo dio un pantallazo de la situación actual. “Aserraderos bajo agua y los montes con caminos inundados, no permite poder cumplir con los pedidos de ventas. Atrás quedo un 2018 muy crítico, por las altas tasas de interés, cadena de pago cortadas y la esperanza de remontar en el nuevo año se harán esperar, al menos, por otros treinta días”, explicó.

 

“La situación es preocupante; centenares de empleados sin poder trabajar y los aserraderos con pedidos de madera sin poder entregar.En esta fecha, promediando enero, deberían arrancar los aserraderos su actividad. En esta ocasión se complicó por la caída de más de 350 mm de lluvia en la zona”, graficó el empresario de Todo Pallets.

 

Sotelo emplea a unos cien operarios en la industria y otros treinta en la actividad forestal. “Todo está paralizado. El aserradero con treinta centímetros de agua y a los montes no se pueden entrar, porque los caminos están inundados. Si las lluvias pronosticadas para esta semana finalizan, se estima unos treinta días más para comenzar a operar las industrias”.

 

 

 

 

EP / PE

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