La Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) anunciará que totalizó 3,3 billones. Analistas esperan que el año termine con una suba del IPC del 47,5%. De esta manera, los recursos tributarios habrán aumentado casi veinte puntos menos que la inflación, que los analistas calculan en 47,5% promedio.
Estos resultados, tanto en lo mensual como anual, reflejaron en gran medida el menor nivel de actividad económico en especial en lo relacionado con el mercado interno, que solo en el tercer trimestre del año presentó una caída interanual del 3,5%, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Esto se observa en que la recaudación de aportes al sistema de seguridad social solo aumentó 25% en términos interanuales, por un menor nivel de empleados registrados, unos 120.000 menos entre noviembre de este año e igual mes del 2017 y el retraso en la actualización de los salarios. A eso se le debe agregar que la recaudación de impuestos internos aumentaron, todos juntos y en promedio un 27%, pero los provenientes del comercio exterior vienen incrementándose al 50% interanual.
Una gran modificación fue que, a partir de septiembre y luego de la devaluación que llevó al dólar a cotizar cerca de los $40, el Gobierno retomó el cobro de retenciones a las exportaciones, en especial al trigo, el maíz, el girasol y a los combustibles, con los cuales las cuentas del Estado Nacional recuperaron dinamismo.
Además, el titular de la AFIP, Leandro Cuccioli, destacó que “la mayor formalidad de la economía, a través del pago con tarjetas de débito u otros medios electrónicos, ayudaron a incrementar la recaudación”.
“Se siguen instalando unos 65.000 POS por mes y en los próximos días estaremos anunciando nuevas medidas para ampliar el uso de las nuevas tecnologías por parte de los consumidores, así como nuevas reglamentaciones para que los comercios estén obligados a aceptar un mínimo de tarjetas de pago y compra”, dijo Cuccioli a comienzos de diciembre.
Desde el organismo destacaron que “los comercios no quieren perder de vender y antes un restaurante, que por ahí no te daba ticket y solo recibía efectivo, ahora tiene que tener el pos y aceptar que le paguen $1000 con tarjeta de débito, porque nadie va a ir con tantos billetes en la mano”.
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