Un cumpleaños con nombre, Francisco

Hemos vivido un cumpleaños con nombre, Francisco. Un papa con aire fresco que ha cumplido en creces con la humanidad al lograr transmitir a las generaciones razones para vivir y para esperar como lo asevera la Gaudium.

Él, cada día regala a los nacidos del mundo esperanza y amor;  enseña a ser feliz encontrando fuerza en el perdón, aprendiendo de los fracasos y reconociendo que vale la pena vivir la vida a pesar de los desafíos, incomprensiones y períodos de crisis.

Como Jesuita, es amigo de la sabiduría en los inviernos, y acostumbra a usar las lágrimas para regar la intolerancia, las pérdidas para refinar la paciencia, las fallas para esculpir la serenidad, el dolor para lapidar el placer y los obstáculos para abrir las ventanas de la inteligencia.

En el próximo mes iniciará la XXXII Jornada Mundial de la Juventud en Panamá, probablemente su última en visitar. Allí será recibido por unas 300.000 almas con mucho en común frente a las ilusorias propuestas de los ídolos del mundo. Santos como los describe Gaudette,  personas con memoria, coraje y futuro que generarán procesos de siembra y riego que otros verán florecer.

“La juventud es maravillosa, pero no hay que decírselo”, (Cho en Lai). Gracias a su grandioso ecumenismo, en meses, pues “el tiempo es superior al espacio”, estará en suelo Chino.

Los pueblos llevarán en sus oídos cada regalo de esperanza y paz, sus dichos y coherencia con sus acciones, su austeridad, sus gestos y sus mensajes.  Sus prédicas de amor y servicio que dan sentido a nuestras vidas.

San Juan Bosco, fundador de la Congregación Salesiana presente en más de una centena de países, aseveró: “El camino que el hombre empieza en la juventud, lo sigue en su vejez hasta la muerte”.

La vida es un talento (Mt 25, 14-30), y nos da la opción de elegir; está en nosotros cuáles caminos y las “formas” de cómo los vamos recorriendo mientras consultamos a los “baqueanos” y escuchamos a la madre naturaleza. Es posible recorrerlos “ligeros de equipaje”, sin seguir intrascendentes tendencias y con austeridad, una palabra que se practica mucho antes que cualquier culto religioso y que ha sido desterrada de los medios.  “Las vacaciones las tendremos en el paraíso”, Don Bosco.

Gracias Jesuitas, gracias Francisco y feliz cumpleaños.

 

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