El año cierra con unos 500 negocios dados de baja en la capital misionera. Las zonas más afectadas son el microcentro y las cuatro avenidas, según precisó el secretario de Promoción de Desarrollo de la Municipalidad de Posadas, Telmo Cabrera, quien además afirmó que tanto en Itaembé Guazú e Itaembé Miní no cerró ningún comercio y hubo una explosión de nuevas opciones.
El país cierra el año con un clima social complicado debido a la inflación, que roza el 40%. Posadas tiene una particularidad al encontrarse en zona de frontera donde debe competir con comercios de Paraguay. “Somos una ciudad limítrofe con un país más competitivo porque tienen diferentes impuestos”, reconoció el secretario de Promoción de Desarrollo de la Municipalidad de Posadas, quien además dijo que la suba de dólar tampoco se tradujo en mayores ventas para los comerciantes de la capital misionera. “El posadeño está endeudado y eso lleva a que la gente tenga mayor poder impositivo y la inflación está impactando en los sueldos”, señaló.
El funcionario dijo que cerrarán el año con unos 500 comercios que dieron de baja y esto se traduce en gente que se queda sin trabajo. Puntualizó que suelen ser los comercios más chicos y en el microcentro. En la periferia de la ciudad, en cambio, no cerraron muchos. “La gente también está cambiando la costumbre de compras, el que vive en Itaembé Miní, Itaembé Guazú busca hacer las compras en su lugar para ahorrar costos”, indicó.
Reveló que en Itaembé Guazú e Itaembé Miní hay una explosión de comercios ya que la gente no quiere trasladarse de su barrio para adquirir lo que consume, dijo.
EP/ APF
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