El KY-O1L de Kyocera es un teléfono celular que rompe con todo lo que vienen presentando los gigantes como Samsung y Apple, y apuesta por la delgadez y la simpleza.
Se trata de un dispositivo exclusivo para el mercado japonés que mide 9 centímetros de alto y 5 de ancho (como una tarjeta de crédito), tiene un espesor de apenas 5,3 milímetros en su parte más gruesa y pesa 47 gramos.
Trae una pantalla de tinta electrónica de 2,8 pulgadas, conectividad LTE (4G) y una batería de 380 mAh, y carece de cámara fotográfica.
El gadget saldrá a la venta en noviembre, exclusivamente a través de la telefónica NTT DoCoMo de Japón, con un precio de 32.000 yens (unos 285 dólares). Desde la web de la empresa aseguran que es «el teléfono más delgado del mundo», cosa que es cierta en la actualidad, aunque hubo aparatos más delgados como el Vivo X5 Max de 4,85 milímetros.
La web de NTT DoCoMo lo presente como un accesorio «atractivo», y asegura que no pasa desapercibido. Además, destaca su bajo consumo, y sostiene que se trata de una «sorprendente experiencia nueva».
Por lo que puede verse, tiene funciones básicas como agenda, calculadora, calendario, y además permite navegar por la web, aunque claro, en blanco y negro. No queda claro cuál es el sistema operativo ni si pueden agregarse apps, pero sin duda se trata de una curiosidad que tendrá sus fanáticos.
Fuente: Clarín
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