El descuartizador de Villa Cabello volvió a pedir declarar con el suero de la verdad y le respondieron que eso es más del cine que de la realidad

El juicio a Martín Monzón, acusado de apuñalar y luego descuartizar a su pareja en un departamento de Villa Cabello, en agosto de 2015, se hará en marzo del año que viene. Durará aproximadamente un mes.
El debate oral estaba previsto para este mes, pero el fiscal subrogante para el proceso, Christian Antúnez, está de turno y eso complicaba la agenda del Tribunal Penal Dos, donde se iba a realizar el juicio.
Además, la defensa de Monzón volvió a llevar un incidente del caso al Superior Tribunal de Justicia. Es un pedido que ya fue desestimado en instancias inferiores y que correría la misma suerte: que el imputado declare bajo los efectos del llamado “suero de la verdad”.
La intención del defensor oficial Miguel Ángel Varela es que Monzón declare luego de recibir una dosis menor de pentotal sódico, un antestésico que provoca una especie de sueño hipnótico y que, en teoría, no dejaría mentir. El objetivo es que esa declaración la brinde durante el debate oral.
El acusado sigue sosteniendo que el crimen fue accidental, que en realidad Horacelia empezó el ataque, enfurecida, porque él no le permitía salir para que ella viera al supuesto amante que tenía.
Monzón declaró que incluso él fue a la casa de ese supuesto amante para pedirle que se terminara esa relación clandestina y que ese hombre le habría dicho que quien lo buscaba era la adolescente.
El 16 de agosto de 2015, la pareja discutió en su departamento de la chacra 150. Horacelia recibió al menos tres cuchillazos, que le ocasionaron el deceso. Después del crimen, Monzón desmembró el cuerpo y lo repartió en distintas bolsas de consorcio. Los restos fueron esparcidos por distintos puntos de Villa Cabello.
Como la chica desapareció sin dejar rastros y dejó a su bebé de mes, su familia radicó la denuncia. Monzón empezó a entrar en contradicciones, hasta que confesó el macabro episodio. Claro, pero dio una versión diferente a la conclusión a la que arribaron los investigadores.
El pedido de declarar bajo los efectos del suero de la verdad fue rechazado por el Tribunal Penal Dos. Entonces, Varela interpuso una casación, desestimado por los jueces. Entonces acudió en queja al STJ.
En su rechazo al planteo del defensor de Monzón, el camarista Gregorio Busse, del TP2, sostuvo “que la admisión de semejante medida carente de todo rigor científico importaría una desnaturalización de los medios de prueba admisibles en un proceso jurisdiccional y de ahí la firme decisión de este magistrado de denegar la producción de la misma; en efecto, si hoy admitimos la utilización de una sustancia cuya supuesta efectividad se afirma más en su utilización como recurso argumental de cine y novelas policiales que en su probado funcionamiento en el campo de la realidad; mañana estaríamos consultando videntes, recibiendo declaraciones de médiums y admitiendo informes de tarotistas, disciplinas que, aunque parezca mentira, ofrecen aproximadamente el mismo nivel de sustento científico que la exigida bajo efectos del pentotal sódico”.