Habló la maestra torturada en Buenos Aires: «A la tercera olla nos dijeron que íbamos a terminar en el cementerio»

Corina De Bonis fue torturada en la panza con un punzón. «Quiero tener fe en la Justicia y pensar que esto se va a revolver».

Todavía shockeada y dolorida por los cortes que le hicieron, la maestra Corina De Bonis habló por primera vez con la prensa después de que fue secuestrada en la puerta de una escuela de Moreno. «Primero nos rayaron los autos y después vinieron por nosotras», dijo, todavía asustada por lo sucedido.

«Uno trata de tener entereza. Somos docentes y lo que hacemos es por lo pibes. Recibí muchos llamados de apoyo, pero me los voy a guardar», contó la mujer de 47 años, que fue abordada el miércoles pasado a la tarde por dos hombres a la salida del Centro de Educación Complementaria de la zona norte de Moreno.

En ese momento, los atacantes le cubrieron la cabeza con una bolsa de plástico y le tajearon la panza con un punzón: le escribieron ‘ollas no’. «No puedo dar detalles del episodio porque nos pidieron de la fiscalía que evitemos hablar del tema porque están investigando. Quiero tener fe en la Justicia de que esto se va a revolver», indicó.

En este marco, De Bonis recordó que las amenazas comenzaron el 28 de agosto después de que «le rayaron los autos a las maestras que participaban de las ollas». «Primero fueron los vehículos, después fuimos nosotras. La olla no la dejamos y seguimos dando de comer con el apoyo de los compañeros con donaciones», contó la docente.

Sin embargo, las intimidaciones se volvieron cada vez más intensas. «Recibimos una tercera amenaza en la que nos decían que la próxima (olla) va a tener que hacerse en Güemes y Roldán, que es el lugar en donde está el cementerio municipal», aseguró la maestra. Los mensajes de los agresores eran a través de llamados anónimos o por cartas.

En el cierre de una jornada de protesta encabezada por CTERA y SADOP, el titular de Suteba, Roberto Baradel, se refirió al ataque a la maestra. «Repudiamos fuertemente, de una forma absoluta, el secuestro, la tortura de Corina y las amenazas que todavía reciben otros docentes y la comunidad educativa de Moreno por luchar por la educación pública», manifestó el dirigente sindical, quien cerró el masivo acto frente al Congreso de la Nación.

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