Es una de las noticias más esperadas por las operadoras y el gobierno neuquino. el jueves, el ministro de Energía de la Nación, Javier Iguacel, acordó con su par chilena, Susana Jiménez, habilitar las exportaciones de gas no convencional de Vaca Muerta a partir de octubre.
Es una definición central, que en el corto plazo garantiza que el excedente de gas pueda ser comercializado en el vecino país, una alternativa muy importante en un contexto de suba constante de la producción y bajas estacionales del consumo interno.
“Vaca Muerta nos va a dar gas en mucha abundancia, para que tanto los habitantes de Argentina como los de Chile disfruten de un gas mucho más barato, logrando una economía mucho más limpia, más verde, con menos contaminación”, expresó Iguacel, luego de la cumbre desarrollada ayer en Santiago de Chile.
Del lado chileno, Jiménez explicó el beneficio: “Una mayor integración en el intercambio de gas puede también ser una buena solución para abordar problemas como la contaminación de las ciudades del centro-sur del país, dando más opciones para la matriz energética para calefacción en esa zona, donde hoy predomina la leña húmeda”, manifestó.
El comunicado difundido por el ministerio que encabeza Iguacel menciona que luego de la “reunión de ambas autoridades, se pudo confirmar la importación de gas natural no convencional desde Argentina a partir de octubre de este año, en particular, desde Neuquén por el yacimiento de Vaca Muerta hacia el Biobío”.
Además, se conversó el estado de la producción de gas no convencional en la Cuenca Austral y las eventuales exportaciones de gas natural a la Región de Magallanes, reafirmando el interés de Chile por contar con suministro de gas natural argentino para la zona sur y austral.
La posibilidad de abrir el grifo de las exportaciones había quedado delineada en junio, luego de un primer encuentro entre la ministra chilena y el ex titular de la cartera energética nacional, Juan José Aranguren.
En el plano local, la apertura de las exportaciones implica la posibilidad de apuntalar el ritmo de la producción de no convencionales. Es un precedente en cuanto al acceso a otro mercado, en momentos en que se vislumbra el interrogante de dónde colocar más fluido. Producir más y venderlo implica el acceso de la provincia a más fondos por regalías.
En el acuerdo se establece que estas operaciones podrán realizarse “siempre que no comprometan el abastecimiento interno, no afecten la seguridad de la operación, ni la calidad y confiabilidad de los servicios de transporte y distribución de gas natural y de electricidad de cada país”.
“La integración energética con Argentina significará enormes beneficios para ambos países como, por ejemplo, mayor seguridad y flexibilidad a nuestros sistemas, y comenzar una futura integración energética regional en el cono sur”, aseguró la ministra chilena luego del encuentro.
Fuente: La mañana de Neuquén
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