Nena violada en Pozo Azul: se suspendió la Cámara Gesell porque la víctima se mudó y ahora tienen que volver a ubicarla

Estaba previsto que las dos hermanitas atacadas en abril en Pozo Azul por el pervertido que raptó, violó y golpeó brutalmente a la menor de ellas declararan el miércoles en Cámara Gesell. Pero la audiencia se suspendió porque la familia de las chiquitas se mudó y la notificación no les llegó.
Ahora, el juez de Instrucción Tres de San Vicente, Gerardo Casco, debe ubicar a las nenas, que tienen tienen 6 y 12 años, respectivamente, y volverlas a convocar.
En su momento, las hermanitas habían dado las características del autor del hecho. Esa persona “tatuada” de la que hablaron habría sido Franco Emanuel Sotelo (24), quien días después murió atropellado por un camión en Garupá, cuando escapaba de la Policía.
La niña abusada, por las gravísimas lesiones con las que resultó, estuvo durante semanas internada en el hospital de Pediatría de Posadas, donde la salvaron de la muerte. Actualmente, se recupera junto con su familia.
En Cámara Gesell, con la asistencia de psicólogas, lo que se busca es que las niñas, sobre todo la más chica, aporte la mayor cantidad de detalles posibles sobre el traumático episodio que vivió y que la dejó durante varios días al borde de la muerte.
Antes del abuso en Pozo Azul, una madre y su hija, en San Pedro, fueron víctimas del mismo malviviente. A la mujer la castigaron duramente en la cabeza con un objeto contundente y la niña alcanzó a correr. “Esa señora hizo una descripción que coincide plenamente con el buscado”, indicaron fuentes judiciales.
Además, hay otro testigo, de un comercio (sería una estación de servicios) que describió a la misma persona, porque le había vendido una bebida alcohólica (una cerveza). La descripción coincide con la de Sotelo.
“En el ataque en San Pedro, la hija de la mujer sale corriendo y empieza a gritar. Esto hace que el delincuente cese en su accionar”, añadieron los informantes.
Las hermanitas de Pozo Azul no tuvieron la misma suerte.