Contra todos los pronósticos médicos, un hombre de 35 años salió del coma luego de un mes y tras ser desconectado de la máquina que lo mantenía con vida. La familia había comenzado a planear el funeral luego del aviso de los médicos.
Se trata de Beau Shortis, padre de tres hijos, en Melbourne (Australia).
El 25 de noviembre salió con unos amigos para celebrar la fiesta de compromiso de uno de ellos. Durante una discusión que derivó en pelea esa noche, Beau recibió un golpe que le provocó el estado de coma.
Shortis permaneció de esa manera durante un mes en el hospital «The Alfred». Su familia esperaba un milagro pero los médicos les advirtieron que no había mucho por hacer y se llegó a la decisión de desconectarlo.
Entonces, se dio parte a la división de investigación de homicidios, mientras los allegados a la víctima comenzaron a planear su funeral.
Sin embargo, dos días después, Beau despertó y aseguró que no recuerda lo sucedido.
«Fue una gran noche, estuve con mis amigos y le deseé a mi mejor amigo un matrimonio feliz. La vida me dio una segunda oportunidad», sostuvo Shortis al diario «Daily Mail».
Dos meses más pasó el hombre internado por las consecuencias del cráneo destrozado, daño cerebral, vértebras fracturadas, pérdida de visión en un ojo y amnesia.
Si bien ya volvió a su casa con la familia, sigue el proceso de rehabilitación, ya que los médicos le advirtieron que además tardará entre seis y nueves meses en volver a caminar.
«Estoy acá por una razón, todavía no sé lo que es, pero debe ser bueno, simplemente no era mi momento», concluyó Beau en declaraciones al «Daily Telegraph».
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