Las islas Bahamas son uno de los destinos más visitados en el Caribe. Sus playas de arena blanca y mar cristalino atraen a cualquier amante del verano, que desea descansar al sol. Pero este paraíso casi se convierte en una tragedia cuando un nene fue perseguido por cuatro tiburones. Sin percibir el peligro que se le acercaba, el pequeño siguió nadando hasta que le gritaron desde la orilla.
Artem Tkachenko, uno de los turistas que presenció la escena, estaba filmando con su drone. Hasta que entró en pánico al divisar cuatro ejemplares medianos que nadaban con velocidad hacia el chico. En cuestión segundos, los animales se acercaban aún más rápido a su futura presa hasta que le empezaron a hacer señas desde la playa.
«Gracias a Dios que me escuchó», aseguró el hombre, en una entrevista con Daily Mail. El nene logró volver a la orilla sano y salvo. Al final del video, se puede observar como los animales se alejan del lugar.
En junio del 2017, una buceadora que estaba nadando en la isla fue atacada por un tiburón, que le mordió el brazo derecho. La mujer se pudo escapar al atacarlo con un golpe y espantarlo de la escena. Pero no fue la única.
A principios del 2015, una turista estadounidense que estaba en el agua con su marido, sintió como «algo» le mordía la espalda. La víctima Lacy Webb Martin, de 34 años, perdió el conocimiento al darse cuenta que efectivamente le había arrancado una parte. Aunque fue aerotransportada de urgencia a Miami, las heridas fueron tan graves que tuvo que someterse a una larga cirugía reparadora.
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