Liberarán al joven con problemas mentales que estuvo 10 años presos por violar a un nene en un hogar

El joven de 25 años inimputable por problemas mentales que estuvo preso una década por violar a un nene en un hogar de Posadas recuperará la libertad. Quedará a cargo de un cuidador designado por la Justicia de Familia: un tío.
El caso de José Daniel M. había llegado hasta la Cámara de Representantes donde la diputada Miriam Duarte impulsó y logró que se aprobara un Proyecto de Comunicación en el que se solicitó al Poder Judicial que revisara de manera “urgente” la causa del muchacho, cuya detención fue considerada “irregular e ilegal” por la legisladora.
Hace unos días, una Junta Médica dispuesta por el juez de Instrucción Dos, César Yaya, concluyó que el joven, que padece sordomudez y oligofrenia moderada, podía salir de la cárcel y estar bajo cuidado de un familiar. Ante ese dictamen, el magistrado, a cargo de la causa, ordenó una “morigeración de la medida cautelar”; es decir, la libertad controlada, con la obligatoriedad de un nuevo examen multidisciplinario dentro de tres meses.
José había llegado al hogar de niños “Fundación Virgen de Caá Cupé” de Posadas luego de que el Ministerio de Bienestar Social le buscara un lugar, porque se encontraba en la calle. Se creía que el chico era paraguayo y que no tenía parientes en Misiones.
Del adolescente se volvió a tener noticias el 31 de agosto de 2007, cuando se supo que había abusado de uno de sus compañerito de ocho años, luego de atacarlo a patadas. La víctima contó a los responsables de la institución lo que había sucedido y estos radicaron la denuncia ante la Policía. El paso siguiente fue el inicio de una causa judicial.
José Daniel fue arrestado a los 15 años. Cuando lo sometieron a un examen médico se constató que era sordomudo y que padecía un grado leve de oligofrenia, que se corresponde con una etapa leve y mediana. En el estudio se aclaró que las personas con esa patología “poseen solamente una rudimentaria afectividad de neto corte instintivo y estas características guardan riesgo para sí o para terceros”.
El joven fue declarado inimputable y en consecuencia se lo sobreseyó del delito de abuso sexual con acceso carnal, ordenándose su alojamiento en el pabellón de Inimputables de la Unidad Penal de Loreto, requiriendo un informe mensual respecto de su tratamiento y comportamiento.
En octubre de 2009, se determinó que el chico era de Jardín América y que se había fugado de su casa a los 14 años. Encontraron a su madre, Rosalía, quien pidió hacerse cargo de él, pero la mujer murió antes de culminar los trámites. Luego tomó la posta un tío. Y los estudios que le realizaron abrieron la posibilidad del cese de la medida de seguridad.
Ahora, diez años después, el joven se reencontrará con su familia.