“Tiempos rojos”, un libro sobre el impacto de la revolución rusa en la Argentina

La revolución Rusa es uno de los acontecimientos más importantes en la historia moderna de la humanidad. En estos días se cumplieron los 100 años de la denominada revolución de octubre, el segundo y definitivo capítulo del proceso revolucionario que convirtió a Rusia en el primer proyecto comunista triunfante en el mundo.


Hernán Camarero en Radio Libertad

Desde aquel lejano año 1917 hasta la actualidad, han ocurrido numerosos acontecimientos de importancia e, incluso, la propia revolución se transformó en una monumental experiencia denominada Unión Soviética hasta su disolución a comienzos de la década de 1990.

En este marco recordatorio, es llega “Tiempos rojos”, en donde Hernán Camarero plantea una interesante mirada sobre el fenómeno, ya que se propone estudiar “el impacto de la revolución rusa en la Argentina”.

El libro, editado por Sudamericana, reúne en sí mismo varias dimensiones sobre el tema. En primer término, una descripción sobre la propia revolución en Rusia con sus dos instancias, el golpe de febrero y sus expectativas democrático burguesas y el definitivo de octubre, con el triunfo de los soviets y el avance hacia el comunismo.

Acotada, es cierto, esta descripción tiene el mérito de clarificar una instancia política de enorme complejidad.
En segundo lugar, la realidad Argentina de la década de 1910, con una coyuntura muy particular debido a la sanción de la Ley Sáenz Peña, en 1912, que abrió paso al triunfo de la Unión Cívica Radical y la llegada al gobierno de Hipólito Yrigoyen, ocurrida pocas meses antes de la revolución rusa. Ese contexto, con un gobierno que pretendía representar sectores populares a los que el orden conservador había despreciado en su acción gubernamental, será un elemento de importancia para entender el impacto de la revolución en el país.

Por otro lado, y con un capítulo que pivotea sobre su conformación y realidad en 1917, aparece el actor social clave a la hora de pensar estos fenómenos, que es la clase obrera argentina. Se trata de un conjunto bastante heterogéneo que recibirá las novedades de lo ocurrido a miles de kilómetros con una expectativa que nos muestra a las claras la velocidad con la que circulaba la información en la época.

La semana trágica del 19 y los sucesos de la Patagonia rebelde son consecuencias directas o indirectas del impacto de la revolución de octubre en el país.

Por último, tenemos a los partidos de izquierda. Allí el socialismo, con una presencia ya consolidada en el país gracias a figuras como Juan B. Justo o Alfredo Palacios, debió interpretar y acomodarse ante las novedades. Tarea que no le resultó del todo sencilla y que ocasionó algunos desmembramientos. El más importante, claro está, es la aparición del partido comunista, que alzó claramente la bandera roja de la hoz y el martillo.

Quizás el dato más sorprendente de “Tiempo rojos”, es la clara consciencia que tuvieron los actores de la época de estar presenciando un hecho de enorme relevancia histórica. Los diarios que se publicaron a los dos o tres días de la revolución, ya hablaban de un acontecimiento extraordinario, cuyo parangón era, ni más ni menos, que la revolución francesa de 1789 que abrió paso a la modernidad.

Camarero, uno de los mayores exponentes en la Argentina de los estudios sobre la izquierda, logra, en definitiva, plasmar el impacto de la revolución en nuestro país. Lo hace con un estilo que facilita la comprensión sobre temas cuya complejidad suelen ser casi intransitables para el lector común. Ese es un mérito indiscutible del libro, que sin lugar a dudas se ha ganado un espacio entre las obras de consulta obligada a la hora de abordar aquel hecho histórico de la revolución rusa.

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