Jorge Thione es padre de dos niños: una nena de un año y medio y un varón de tres años. Jorge Thione está desesperado, luego de hacer varias denuncias. Sin ser tenido en cuenta por la Justicia, se acercó a los medios de comunicación para buscar una solución ante el problema que sufren sus hijos: Jorge Thione denuncia que sus pequeños son golpeados brutalmente por su abuela materna.
«Este tema se inicia hace siete meses cuando nos separamos. Ella (su ex mujer) se va de casa con los nenes. Al mes me llama el médico pediatra me avisa que salían desde hace un año, pero no le di demasiada importancia. Ya se rompió una pareja. Por infidelidad o por lo que fuera, no daba ni siquiera para pedirle explicaciones a ella de por qué me había sido infiel. Porque eso pasa obviamente cuando no te aman más. Es así y jamás obré violentamente», cuenta calmo Thione para situarnos.
Y continúa: «A los días que ella se da por enterada que yo sé lo del médico, ambos ponemos abogados. Iniciamos una mediación sobre el régimen de visitas y la cuota alimenticia en la que pactamos $3000 por mes de la cuota alimenticia (propiamente dicha), $3800 que yo tenía que pagarle de la prepaga de los nenes y $1500 del jardín del nene porque va a un colegio privado. El régimen estipulaba que yo lo veía miércoles a la noche y viernes por la noche y un domingo por medio. Se cumplió todo a rajatabla».
Jorge prosigue con el relato en el cual todo se notaba normal, detalla las visitas y cuenta que existió un pedido de no contacto de su ex mujer para con él. Intentó evitarlo, como suele ocurrir entre muchas ex parejas. Hasta que, quien fuera su pareja, le hace una seguidilla de denuncias por violencia doméstica a él «que no son ratificadas por ella y ahí se inicia todo un expediente en el Juzgado de Familia».
La jueza que entendía la causa otorga una perimetral para ambos y ahí comienza el caos. «A mí me daba miedo cómo estaba actuando ella. Resuelve también mandarnos por separado a distintos psicólogos y presentar cada un mes, un informe hecho por el licenciado en cuestión. Pero yo hacía tres meses que iba a terapia por propia voluntad, así que automáticamente pedí y presenté el primer informe. Ya estoy por presentar el quinto informe. Además nos mandan a unas charlas de contención a las que yo asisto. Ella jamás se presentó ni a las charlas ni llevó los informes psicológicos. Por si esto fuera poco, dejó de llevar al nene al jardín de infantes».
Jorge reclama: «Presenté las inasistencias de mi hijo al jardín, en el Juzgado. Y a su vez, mi ex mujer, rompió el régimen de visitas cuando una vez que debía retirarlo el hermano de ella o su madre a los nenes por mi negocio, no fue nadie». Ante esta situación habló con su abogado que le aconsejó que los menores permanecieran con Thione hasta que alguien fuera a buscarlos e hizo una exposición policial.
«A las 14 van ella y los hermanos a buscarlos a mi casa. Jamás le negué los nenes, pero sí llamé a la policía para que constatara que estaba rompiendo la perimetral. Cuando les alcanzo al nene de tres años, me pegan. La policía comienza a separarlos y cuando le paso la nena, me vuelven a pegar. Hago la denuncia por lesiones leves y por haber roto la perimetral. Todo está en el Juzgado», narra a este portal.
«Para esa fecha, el nene me empieza a contar en un video que la abuela ‘le pega fuerte en la cabeza’ se lo muestro a mi abogado que me dice ‘tranquilo, a ver qué pasa’. Al mes siguiente, empiezo a observar que cada miércoles y cada viernes que yo los tengo empiezan a venir golpeados. Y no en codos y rodillas como cualquier nene que se lastima jugando. A todo esto el nene me sigue contando cosas como que la mamá con el abuelo se corren con cuchillos para apuñalarse, me dice que el abuelo le quiere pegar chirlos fuertes y que la abuela lo encierra en la pieza y que le apaga la luz.»
En la Fiscalía se asombran del video con el relato del nene en el que dice que la abuela es la que le pega fuerte en la cabeza. Otro video del nene en la chata, en el que dice que no quiere volver a la casa con la madre y con la abuela. Los nenes siguen viniendo golpeados.
«La jueza esta mañana expresa que se tomaron todas las medidas precautorias y que los nenes están bien. Que lo mío es sólo una lucha misógina y despechada», cuenta desesperado Jorge Thione cansado de distintos hechos violentos y denuncia una censura a los medios locales (de Venado Tuerto).
«Tengo miedo a las represalias» asegura.
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