Un perro intentó proteger a su familia de una entradera y casi lo matan

Chester, un perro mestizo de dos años que intentó proteger a su familia de delincuentes, está al borde la muerte. Los delincuentes intentaron ahorcar al animal con un alambre y le propinaron cinco puñaladas en el cuerpo.

El episodio ocurrió el domingo pasado en la mañana cuando Joaquín y su esposa Mercedes, despertaron como cualquier otro día en su vivienda, ubicada en una chacra sobre una calle sin salida, en la capital neuquina. Sin embargo, durante una caminata hacia la tranquera, el hombre de 33 años se encontró con su perro con heridas graves en sus patas y estómago.

«En un principio pensé que lo había atropellado un auto pero no hay mucho tránsito por la zona. Cuando lo empecé a inspeccionar me di cuenta de que tenía cortes, descubrí cinco puñaladas hechas como con un cuchillo de cocina. Después nos dimos cuenta de que todavía tenía un alambre enrollado alrededor del cuello, lo habían intentado ahorcar», relató indignado Joaquín al diario La Mañana de Neuquén.

No es la primera vez que Chester intentaba proteger su territorio de ladrones y, según explicaron sus dueños, siempre salía a hacer frente a las personas que que se acercaban a la propiedad. No obstante, el domingo a la madrugada se llevó un mal momento al ser atacado por los delincuentes desalmados. Los vecinos temen que se trate de una nueva modalidad salvaje para dejar sin custodia los hogares.

«Es un perro muy arisco y escurridizo, si a nosotros nos cuesta agarrarlo no me imagino como lo habrán hecho. El chiquito siempre salía a ladrar y confrontar a todos. Yo creo que el nos salvó de muchos intentos de robo», confesó su dueño.

Chester fue trasladado este lunes en la mañana a una veterinaria de Cipolleti, para comenzar con las suturas y medicamentos para que salga adelante. Proteccionistas y ciudadanos se ofrecieron a ayudar y colaborar con la atención y las tareas de curación. «Lo único que queremos es que sobreviva», concluyó Joaquín.