Mendoza: Declaró otro testigo en la causa del rugbier y complicó más a Julieta Silva

Un odontólogo que estuvo esa madrugada en el estacionamiento vio como sucedieron los hechos.

 

Genaro Fortunato perdió la vida hace 10 días, después de que su novia lo atropellara a la salida del bar mendocino «Mona». Desde entonces, Julieta Silva permanece detenida en el penal de San Rafael, estar imputada de “doble homicidio agravado por el vínculo de pareja y la comisión con alevosía en concurso ideal”.

 

Hasta el momento, sólo había un testigo del hecho, un trapito que dijo haberlo visto todo, aunque ahora apareció un hombre que asegura haber estado esa madrugada en el estacionamiento del bar, cuando la joven atropelló al rugbier.

 

Genaro Fortunato falleció después de haber sido atropellado por su novia.

«Ella arranca el auto y sale ligero, el muchacho se agarra de la parte de la ventanilla y se cae al piso. El pibe estaba en la calle, no le dio ni tiempo de pararse porque ella lo pasó por arriba directamente, como si nada», declaró el trapito ante Andrea Rossi, la fiscal del caso.

 

Lo cierto, es que parece que el hombre no fue el único testigo del hecho, ya que el lunes por la mañana, un odontólogo de la ciudad se presentó en la Fiscalía para dar su versión de los hechos.

 

«Estaba feo, llovía o lloviznaba, era una garúa», dijo al principio el hombre y luego explicó que vio el momento exacto en que Silva atropelló a su novio. «Miré hacia donde iba el cuidacoche y vi una persona tirada sobre la calle, en forma perpendicular, con su cabeza en dirección a la banquina», contó.

 

Hay dos testigos que certifican que la joven atropelló a Genaro cuando estaba tirando en el piso.

«Yo calculo que venía a 60 km/h. A todo esto había una persona tirada en la calle y yo pensé que iba a frenar. Pero no frenó, pasó por encima de la persona que estaba tirada», aseguró el testigo y aclaró que él y sus amigos estaban en el estacionamiento porque ya se iban.

 

Según aseguró Sitio Andino, el hombre, también confesó que luego de chocar a Genaro, Silva frenó: «No sé cuántos metros después de atropellarlo, unos 3 o 4 metros».

 

La autopsia reveló que Fortunato falleció por «aplastamiento de cránero».

«Me pregunté qué hacíamos al ver este accidente y llamé al 911, pero ya con el auto andando e inmediatamente nos fuimos», admitió por último el testigo.

 

Genaro falleció el 9 de septiembre, después de que su novia lo pasara por encima con el auto dos veces. La autopsia determinó que el mendocino murió por “aplastamiento de cráneo” y que Julieta tenía 0.8 gramos de alcohol en sangre, 0.3 gramos más de lo permitido para poder manejar.

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