El juez en lo penal económico porteño Gustavo Meirovich ordenó ayer la captura del empresario correntino Mariano Martínez Rojas, ex propietario del diario Tiempo Argentino y de Radio América, que es investigado en una causa por presunto lavado de dinero, a través de 56 empresas fantasmas por las que se fugaba plata al exterior.
El polémico empresario ya estaba imputado desde julio del año pasado en otra causa, por usurpación y daños por los destrozos en las oficinas de Tiempo Argentino y Radio América en Palermo. Allí había irrumpido por la fuerza con una «patota» para desalojar el lugar, que estaba ocupado por trabajadores que reclamaban sueldos adeudados.
Fuentes judiciales informaron a Infobae que el magistrado pidió la captura nacional e internacional de Martínez Rojas, sobre quien se sospecha se encuentra en los Estados Unidos.
El empresario está acusado, junto con al menos otras cuatro personas, algunas de ellas vinculadas a bancos, de sacar del país cerca de 200 millones de pesos a cuentas en el extranjero a través del uso de las Djai (Declaraciones Juradas Anticipadas de Importación).
Martínez Rojas es un empresario correntino y dueño de Grupo M de Luxe, que en los primeros meses de 2016 compró el diario Tiempo Argentino y radio América. Durante su gestión, recibió varias denuncias penales que están en trámite. Tiempo Argentino se convirtió en una cooperativa y el diario se publica todos los domingos; América fue comprada por el grupo Perfil.
En la causa que lleva el juez Meirovich ayer fue indagado «Mister Korea», Hwang Sung Ku, e involucró a Martínez Rojas con el contrabando y lavado de dinero con las ex Djai y el envío de dinero al exterior.
«Mister Korea» está detenido en el expediente y también procesado por la «mafia de los contenedores», en la que está preso Claudio Minnicelli, cuñado del ex ministro de Planificación Federal y actual diputado Julio De Vido.
Las 56 empresas actuaban con el siguiente mecanismo: se presentaban en la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) con ex Djai falsas en las que pedían dólares para importaciones. Cobraban el dinero y lo sacaban a cuentas bancarias en los Estados Unidos y Hong Kong. Nunca hacían las importaciones.
Fuentes judiciales estiman que en toda la maniobra que se investiga se sacaron del país entre 2012 y 2015 de 300 a mil millones de dólares. Las empresas y sus titulares eran inconsistentes para realizar las operaciones con las ex Djai. Por eso también se investiga si hubo participación o complicidad de los entonces funcionarios.
En el expediente hay un prófugo y a principios de julio el juez Meirovich realizó unos 23 allanamientos en los que fueron detenidas 10 personas, entre empresarios y contadores, acusados del lavado de 30 millones de dólares.
Fuente: diario El Libertador