En la mañana de hoy en la Sala de Situación del Ministerio de Gobierno, se presentaron las pulseras electrónicas que comenzarán a utilizarse a corto plazo en las personas que se hallan alojadas en Unidades Penales de Misiones y que cumplen con arresto domiciliario.
La implementación del dispositivo electrónico se llevará a cabo tras el convenio firmado oportunamente entre el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación y el Ministerio de Gobierno de la Provincia.
En la ocasión, el subsecretario de Gobierno Ricardo Wellbach expresó: “Considero valiosa la posibilidad de la reinserción social de aquellas personas que tuvieron alguna dificultad con la ley, ya que esto les permitirá estar en un ambiente familiar y también desarrollar una actividad laboral, teniendo en cuenta que muchas de ellas se pueden realizar desde los hogares”.
“La pulsera dará certeza a la justicia que el detenido está en el domicilio y no en otro lugar”, agregó Wellbach.
A su vez, el subsecretario de Seguridad y Justicia Ariel Marinoni destacó que “esto significa un avance para la provincia respecto a la situación de los internos de las Unidades Penales. Además es una herramienta para que los jueces puedan tener el monitoreo concreto de las prisiones domiciliarias, y da la posibilidad a quienes se encuentran en particulares condiciones de vulnerabilidad de gozar de este beneficio”.
En la oportunidad, también estuvo presente la directora del Servicio Penitenciario Provincial, Alcaide General Nilda Correa.
El dispositivo
La pulsera o tobillera emite una señal de radiofrecuencia que es captada por el receptor en la unidad de monitoreo domiciliario, ésta a su vez transmite por línea telefónica o celular alertas que son recibidas por el Centro de Monitoreo y controladas las 24 horas por el personal del Servicio Penitenciario Provincial.
En los casos de interrumpirse el normal funcionamiento; que la persona que está cumpliendo el arresto exceda el perímetro de su domicilio; salga en horario no permitido; se detecte el corte o apertura de la pulsera, ésta de forma automática emite alertas al Centro y también un correo electrónico.
El sistema que es instalado en la casa del arrestado permite establecer un perímetro que puede regularse desde muy corto a un máximo establecido por la justicia.
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