Nutrición: Hipertensión en el embarazo y sus cuidados en la alimentación

Durante el embarazo puede aparecer una alteración a nivel cardiovascular conocida como preeclampsia, que es el aumento de la presión arterial que surge durante el desarrollo del embarazo, a causa de que la placenta genera sustancias que contribuyen a obstruir las arterias.

La preeclampsia afecta a un 5% de las mujeres embarazadas, no representa una enfermedad de alto riesgo si se trata a tiempo y se toman las medidas oportunas para que la tensión arterial esté controlada. En cambio, en algunos casos podría derivar hacia una eclampsia, situación grave que incluso pueden entrañar riesgo para la vida. Las mujeres con signos de preeclampsia deben ser seguidas muy de cerca por el profesional médico/obstetra.

Mas allá del tratamiento que el médico indique a la mujer con preeclampsia, la alimentación cumple un papel fundamental para evitar complicaciones y mejorar la calidad de vida de la madre durante este momento biológico.

Los principales aspectos de la alimentación a tener en cuenta son:

  • La alimentación debe de ser rica en potasio, un mineral presente en la mayoría de frutas y verduras, en especial en banana, espinaca, tomate, melón o cítricos. El potasio es diurético y ayuda a eliminar el exceso de sal en el cuerpo.
  • Es importante que la dieta de la embarazada esté compuesta por alimentos ricos en ácidos grasos Omega 3, provenientes de pescados de mar no enlatados, para evitar altas concentraciones de sodio, de frutos secos, semillas y aceite de oliva. Estos ácidos ayudan a reducir el nivel de colesterol, previenen la obstrucción de las arterias y facilitan el paso de la sangre.
  • El magnesioes importante por sus propiedades para el desarrollo de los huesos de los niños y su crecimiento. La deficiencia de magnesio está asociado a cuadros de hipertensión. Este mineral está presente en legumbres, cereales integrales, frutos secos o semillas.
  • El calcio ha demostrado su eficacia a la hora de controlar la tensión, además es básica su ingesta para el buen desarrollo del bebé. Está presente en leche, yogures, quesos (preferir magros), tofu o verduras de hoja verde.
  • En las comidas es importante limitar o evitar el consumo de sal de mesa.
  • Está totalmente desaconsejada en la dieta de la embarazada con hipertensión la cafeína y bebidas alcohólicas.
  • Se debe evitar snacks, embutidos, caldos comunes, sopas en sobre comunes, gaseosas, productos de panadería, debido a que todos estos alimentos contienen gran cantidad de sodio en su composición.
  • Por último, pero no menos importante, es el adecuado consumo de agua. Debe ser alrededor de 2 a 3 litros diarios.

Cabe destacar que, en casos de preeclampsia o hipertensión arterial durante el embarazo, es indispensable el tratamiento y seguimiento médico de manera individual, estas recomendaciones son generales, en base a los lineamientos de cuidado nutricional de la enfermedad.

Por la licenciada Romina Krauss – M.P. N° 147

 

LA REGION

NACIONALES

INTERNACIONALES

ULTIMAS NOTICIAS

Newsletter

Columnas