La Franja, uno de los clubes más icónicos del nordeste argentino, celebra hoy un nuevo aniversario de vida. Son 85 años de idas y vueltas, en los que que la institución de Villa Sarita llegó a codearse con los grandes del fútbol argentino, estuvo al borde de la desaparición, y hoy lucha por volver a lo más alto.
Corría el año 1932 cuando Antonio Franco, un enfermero que atendía en un local que por aquel entonces existía en la zona del Parque República del Paraguay, reunió a un grupo de jóvenes del barrio Villa Sarita que deseaba seguir practicando su deporte favorito tras la disolución del club Sportivo Colombo, institución que sobresalía por su potencial en la década del 20.
Antonio Franco comenzó a alternar con ese grupo de jugadores, ávidos por jugar al fútbol y utilizar la cancha ubicada en el corazón del barrio, por lo que lanzó la idea de formar un nuevo club, y tras hablar con uno y con otro, materializó una reunión en su almacén ubicado en la esquina de Ivanowski y Ayacucho (hoy denominada Ángel Acuña).
La historia dice que concurrieron al llamado de Antonio Franco dieciséis personas, en su mayoría jóvenes, entre los que se encontraban Claudio Báez (ex presidente) y Tomasito Martínez (canchero del club hasta su fallecimiento y el más joven de los asistentes de aquella reunión, con sólo 16 años).
Así en forma sencilla, con el acta labrada en un cuaderno de veinte hojas, de abajo hacia arriba (como siempre a lo largo de su historia), con la participación del barrio más famoso de Posadas, el 12 de junio de 1932 se fundaba el club Guaraní.
Nacía un club. Todavía no tenía nombre. Lo que aquellos jóvenes querían era jugar al fútbol. A sugerencia de del doctor Pablo Osvaldo Ruiz (jefe de Antonio Franco), se adoptó el nombre de Guaraní, en reconocimiento de la raza autóctona de la región.
Fue Ruiz también el que dio la idea de que se insertara en el pecho de la casaca blanca la figura de un indio guaraní, pero la idea era muy difícil de concretar por el trabajo que significaba la confección a mano de una figura indígena.
Lo cierto es que las ex instalaciones del club Sportivo Colombo quedaron para Guaraní y, ya en posesión de la cancha, se consiguió la afiliación a la Liga, pagando en aquel entonces diez pesos como derecho de inscripción. Dicen que era mucho dinero.
De esa forma se integró el primer equipo que jugó su primer partido y venció a Racing por 3 a 1 con dos goles «Chiquito» Bianchi y uno de Bejarano. Así, con enorme acompañamiento de la comunidad, comenzaba a desandar su historia el club más popular de Misiones.
Tres años después, en 1935, murió Antonio Franco y todos coincidieron que al Guaraní que él fundó había que agregarle su nombre, como símbolo de unidad entre el Guaraní Azul y el Guaraní Colorado.
Así nació Guaraní Antonio Franco, tal como se lo conoce hoy en todo el país.
El primer título de campeón fue obtenido en el año 1937, apenas cinco años después de su fundación, tras vencer al Club Atlético Posadas por 6 a 2. La hazaña tuvo un matiz sobresaliente, ya que se materializó en forma invicta.
Un hito trascendente en la vida deportiva del club, sin discusión alguna, fue la inauguración de su moderno estadio de fútbol, concretado el 15 de agosto de 1963, bajo la presidencia de Clemente Argentino Fernández de Oliveira: la obra asombró a propios y extraños, con la exhibición de una mole de acero y cemento, con una magnifica tribuna techada, la primera en su tipo en la provincia.
La época de oro en la historia franjeada llegó con sus participaciones en los recordados campeonatos nacionales de 1971, 1981, 1982 y 1985.
En 1971 ascendió tras dejar en el camino en la final a Coronel Aguirre de Rosario (ganó en Posadas 3 a 0 y empató en la cancha de Central Córdoba de Rosario 3 a 3). En el primer partido del Nacional perdió con Boca Juniors en Posadas 1 a 0 con gol de Rogel.
En esos años, el estadio Clemente Argentino Fernández de Olivera recibió a los mejores equipos del país. En 1981, la Franja empató allí con el River Plate de Passarella, Gallego y Kempes por 2 a 2. También, el 21 de abril de 1985, Guaraní se impuso 6 a 0 al poderoso Boca Juniors, que jugó con todas sus estrellas, en un match amistoso. El Xeneize salió subestimando al rival y se encontró con un Guaraní que no lo perdonó.
En esos años, además de Boca y River, Guaraní enfrentó a Independiente, (ganó Guaraní Antonio Franco 1 a 0 con gol de Arce) y San Lorenzo de Almagro (ganó Guaraní 3 a 2 en el Viejo Gasómetro).
También ganó el Regional para acceder al Nacional de 1986, pero como se reestructuró el sistema de disputa previamente, por haber logrado esa clasificación participó en la Liguilla Pre-Libertadores, en la que perdió con San Lorenzo 4 a 1 y 3 a 0. Esa liguilla la disputaron los ganadores del Regional y como consecuencia se ganó un lugar en el Nacional B, donde permaneció dos temporadas.
Guaraní no pudo aprovechar sus oportunidades de ascenso en 1989, con Atlético Ledesma (2-2 y 0-1); en 1993 perdió también en semifinales con Gimnasia y Esgrima de Jujuy (1-2 y 1-2) y en 1994 la final ante Godoy Cruz de Mendoza (0-1 y 0-0).
Luego de participar en el primer Torneo Argentino A, dejó de jugar torneos nacionales hasta la temporada 2003/04, en la que empezó a disputar el Torneo Argentino B. El 17 de junio de 2012 ascendió al Torneo Argentino A tras empatar el partido de ida de la final en Tucumán 0-0 y derrotar como local 3-0 a San Jorge de dicha provincia.
Luego de dos años en el torneo Argentino A el 8 de junio de 2014 juega la final por el segundo ascenso a la Primera B Nacional ante Jueventud Unida de San Luis ganándole 1 a 0 en su estadio en Villa Sarita con gol de Tobías Albarracín. En ese momento se inició una segunda época de oro para la Franja, donde supo enfrentar al Argentinos Juniors de Juan Román Riquelme. Asimismo, derrotó a Arsenal de Sarandí por Copa Argentina, lo que le permitió enfrentarse al Boca de Carlos Tévez, contra el que cayó 4 a 0.
Tras volver a descender al Federal A, hoy Guaraní no se rinde en su lucha por volver a lo más grande del fútbol argentino.
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