La historia de Azul, la beba que sufre de hidrocefalia y viaja la semana que viene al Garraham

Luis y Dominga son los abuelos de Azul, la beba de 1 año y 11 meses que sufre de hidrocefalia y viaja el próximo miércoles a Buenos Aires para recibir un tratamiento en el Hospital Garraham. En Radio Libertad contaron su derrotero y cómo recibieron ayuda tras hacer visible su problemática en las redes sociales.

Luis y Dominga, abuelos de Azul, en Radio Libertad.

 

Luis trabaja en un aserradero y Dominga en un negocio de Azara. Su hija de 18 años, fue madre soltera hace casi dos años y hoy Azul es la razón de sus vidas. Cuando nació, se enteraron de su condición y por cuestiones que aún no comprenden le habían pronosticado poco tiempo de vida.  Desbastados por la noticia, volvieron y dedicaron su vida a brindarle amor y contención tanto a su hija como a su nieta. Según contaron buscaron sin suerte médicos en el sistema de salud  pública que les indiquen la derivación de la bebita y esto motivó a que tomaran la decisión de llevarla por sus propios medios.  “Nosotros no teníamos los fondos para hacerlo entonces empezamos a vender pastelitos en Facebook y fue ahí donde se comunica con nosotros la diputada provincial Silvia Rojas. Fue la única persona que se acercó desde que empezamos con esto. Nosotros primero queríamos comprar un colchón anti escaras que nos habían indicado para Azul pero no teníamos. La diputada no solo nos consiguió el colchón sino también nos trajo pañales y leche”, contaron.

 

Luego se abrió el camino a nuevas posibilidades e incluso a través de una fundación, la posibilidad de trasladar a Azul al Hospital Garraham de Buenos Aires. “Otra vez la diputada nos ayudó y hoy vinimos a buscar los pasajes porque nos vamos el lunes ya que tenemos turno en Buenos Aires el próximo 7”, relataron.

 

Según pudieron consultar, la condición de Azul es irreversible debido al paso del tiempo. Su cabecita creció tanto que le impide erguirse y tampoco puede caminar. “Vamos con esperanza de una mejor calidad de vida. Le decimos a la gente que se informe que pregunten. Que pidan ayuda, porque hay gente que ayuda como esta diputada y hay que dar a conocer los casos. Nosotros no sabemos el origen del problema que tiene Azul. Ni los doctores saben la causa. Tampoco es culpa de la mamá. Ella hoy no puede mover la cabeza porque es muy grande. La hidrocefalia genera en forma constante líquido en la cabeza. Su cabeza tiene hoy casi un metro de diámetro. Ella come bien, caminar no va poder porque tampoco ni se sienta. Ojalá  la ayuden y pueda tener una mejor calidad de vida”.

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